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MASACRE. El régimen de Bashar al Assad en Guta Oriental dispuso una serie de acciones que ha llevado a que unas 320 personas hayan muerto en cuatro días de bombardeos por las fuerzas Sirias ayudadas por Rusia. Los primeros informes hablan de la muerte de 55 niños, pero esto no fue confirmado de fuentes independientes.

En Guta Oriental, sitiada por las fuerzas gubernamentales desde 2013, viven unas 400.000 personas en condiciones críticas, con casos de desnutrición y hambruna.

Los equipos médicos "son incapaces de hacer frente a este gran número de heridos y no hay suficientes medicamentos ni material médico en la región", señalaron funcionarios de organizaciones de ayuda. Estos voluntarios piden un alto al fuego para que ingresen medicamentos y se puedan evacuar a los heridos. La ONU condenó los ataques.

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