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En su visita a San Carlos, en las últimas horas, Ambrois aseguró que se está “buscando lo mejor para los productores y para la propia cooperativa. Y se busca también, como tema central, afectar de la menor forma posible a los trabajadores de la planta”.

Indicó que existe la posibilidad de procesar esta leche “en forma más eficiente por la propia cooperativa. Y ese es el camino que debemos buscar”.

Por otra parte, apuntó que los trabajadores de la planta de San Carlos van a tener “prioridad” para cubrir las vacantes que cada año se generan en Conaprole, si se encuentra capacitados e interesados. “En caso contrario, se procede como se hace en la reposición de cargos”, agregó.

Explicó que “los números” sobre la situación de la planta van a ser aportados al sindicato, a través de la negociación que se cumple por parte del área de recursos Humanos.

Sostuvo que, si bien Aplema ya está informada sobre esta situación, “está bueno venir a la zona. Este es un tema bien importante para compartir con los productores”, expresó.

Asimismo, remarcó que el cierre está definido. “Los números son claros… Lo que tratamos de ver es cómo afectamos, de la menor forma posible a los trabajadores, y beneficiar al conjunto. En definitiva, esa es la obligación que tenemos todos los integrantes de la cooperativa”.

“Estamos en un mundo muy complejo, de enorme competitividad. Todos sabemos las dificultades que vivimos y tenemos que buscar eficiencias por todos los medios y los caminos posibles”, afirmó.

Ambrois precisó que aún no está definido el futuro que tendrá la planta de Camino Los Ceibos. Tampoco manejó una fecha precisa para el cierre, que se había anunciado que iba a ocurrir en el primer trimestre del año que viene. “No vamos a manejar tiempos. Esto hay que manejarlo con tranquilidad y con calma. Ese es el espíritu de la cooperativa. Y para eso hay ámbitos de diálogo”, precisó.