Argentina vive de espaldas las elecciones en Uruguay
Interés General 20:00

Argentina vive de espaldas las elecciones en Uruguay

El movimiento, la excitación, la militancia, el fervor por las elecciones uruguayas en Argentina, prácticamente no existe, afirmó Ignacio Quartino, corresponsal de FM Gente, quién puso en duda que puedan llegar el domingo 10 o 15 mil votos de ese país para influir en los resultados de las urnas.

“Se miró un poco de espaldas, como que se dice que Buenos Aires está un poco de espaldas al río, en las otras elecciones miraron al río, esta vez las elecciones (en Uruguay) estuvieron de espaldas al río”, dijo Quartino desde Buenos Aires.

Contó que “yo voy a votar, o sea, voy el mismo domingo, y no tuve ningún problema en conseguir pasaje, saqué el pasaje al principio de esta semana, me dieron el descuento, había que ir a la oficina, a determinadas oficinas de Buquebús”.

“En capital federal habían dos (oficinas para tramitar el pasaje con descuento), una en avenida Córdoba y otra en la calle Posadas, o sea que tampoco había tanto acceso para que la gente vaya a comprar su pasaje con descuento”, acotó.

¿VEINTE MIL VOTANTES O 20 MIL VIAJEROS?
Quartino procuró seguir entendiendo lo que pasa a partir de lo que ve. “Lo que tiene que ver con los números, si hablamos de 20 mil personas, bueno, ¿son 20 mil votantes, o 20 mil personas que vienen?”

“Por ejemplo, voy a poner el caso de una familia tipo argentina, la mayoría, los que están radicados hace mucho tiempo, generalmente, capaz que es un matrimonio de uruguayos que está de la época de la dictadura, y tiene hijos”, aproximó.

Agregó que “si tienen cuatro hijos, no creo que hayan viajado para nacionalizarlos uruguayos, que saquen la credencial en Uruguay, y estén habilitados los seis para votar; votarían el marido y la mujer”.

“A lo que voy es que a lo sumo, si viaja un núcleo familiar de marido, mujer y dos hijos, a lo sumo serían dos votos, a lo sumo, porque lo más normal es que fuera un voto, o la esposa o el marido que se casó con un o una argentina”, razonó.

Dijo que si uno “se casó con un argentino ya es un voto solo; el caso mío, yo soy un voto en realidad, y viajaríamos cuatro”.

¿OCHENTA MIL PERSONAS EN UN FIN DE SEMANA?
Quartino continuó desmenuzando la realidad: “Cuál es el número… Están hablando de 20 mil votos, cuánta gente tendría que viajar; 80 mil personas cruzando las fronteras de Uruguay y Argentina, Argentina y Uruguay en un fin de semana”.

“Ochenta mil personas, creo que en la temporada más récord de turismo de Uruguay pasaría eso, que en un fin de semana 80 mil personas crucen la frontera”, continuó infiriendo.

Comparó con que “ahora jugó Estudiantes de la Plata con Peñarol, el miércoles; viajaron 3.000 hinchas de Estudiantes; uno paseaba por Montevideo y había como una invasión de hinchas de Estudiantes de La Plata, y se ve la imagen que había en la tribuna del estadio Centenario, estaba ocupada, en el medio, la tribuna Colombes, no más, eran 3.000 personas”.

“¡Hay que imaginarse 80 mil personas que viajen en un fin de semana a votar, dónde se colocan!”, desafió.

Redondeó afirmando que va a llegar gente a votar, pero muy lejos de la cantidad que se movió en las dos elecciones anteriores.

DESGASTE, EL ASUETO, EL FERVOR
Quartino recordó, además, que “las relaciones (entre los gobiernos de ambos países) se desgastaron mucho; también eso”.

“Si bien hay asueto, hay asueto de dos días libres para votar de los uruguayos que residen en Argentina, que eso se anunció con bombos y platillos, pero si uno es funcionario público uruguayo que trabaja en Argentina, tiene los días libres, pero los uruguayos que trabajan en el ámbito privado no tienen libre”, describió.

“¿Se piensa que todos los uruguayos que trabajan en Argentina son funcionarios públicos? ¿Qué porcentaje hay? No creo que trabajen 70 mil personas, 70 mil uruguayos”, reforzó. Y completó: “Además quedan números altos”.

Relató que “ayer hablábamos con unos amigos que antes los candidatos uruguayos generaban la discusión de quién iba a almorzar a lo de Mirtha Legrand o no (…) en la campaña anterior también se armó terrible lío, que si iban los dos que terminaron definiendo el balotaje, si iba uno o el otro, después Mujica sacó chapa de que no iba porque no era un programa para el perfil de su partido”.

“Este año ninguno de los dos candidatos más importantes mencionaron la posibilidad de ir a almorzar con la Chiqui, y eso que trae suerte, no; en programas políticos tampoco apareció ningún candidato uruguayo”, expuso como muestra de la falta de fervor.

Agregó que el argentino está mucho más interesado en lo que pasa en el balotaje en Brasil, entre la presidente Dilma Rousseff y Aécio Neves, porque tiene mucho más peso en la realidad regional que lo que pasa en Uruguay.

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