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“Las menores tasas de crecimiento del consumo privado, trimestre a trimestre repercuten de manera directa en los resultados del sector comercio y servicios”, afirma el documento.

Agrega que “en este segundo trimestre de 2015 analizando los datos de la encuesta en términos globales, tan sólo el 19% (uno de cada cinco sectores) relevados percibieron un aumento en sus niveles de venta y actividad en términos interanuales.

MAGNITUD
Para tener una magnitud exacta del nivel de la caída que experimenta la actividad en el segundo trimestre de 2015, baste repasar la cantidad de sectores que tuvieron crecimiento en los años anteriores en ese mismo período, comparando sus ventas reales en un año y otro.

En 2015 fueron 19%, uno cada cinco; en 2014 alcanzaron a 50%, uno de cada dos seguía creciendo; y en 2013 fueron 68%, dos de cada tres sectores crecían su actividad y economía.

La contracara de esto es que en el segundo trimestre de 2013 había un sector de la economía que contraía su actividad contra cuatro que crecían, en 2014 fueron uno contra uno, y este año son cuatro que caen en su actividad, contra uno que crece.

MAQUINARIA
El documento se detiene más adelante para auscultar la situación de un sector, el agrícola, que fue el que arrastró a todo el país en 2003, para sacarlo de una de las crisis más profundas en su historia.

“La caída en las ventas de maquinaria agrícola se ha profundizado en el presente año, y acumulan en los seis primeros meses una contracción de 43,9% respecto al mismo período de 2014”, sostiene la CNCS.

Agrega que “en concreto, en el segundo trimestre se vendieron 208 tractores y 13 cosechadoras, frente a los 331 tractores y 63 cosechadoras del mismo período de 2014”.

En el segundo trimestre de 2012 se vendieron 415 tractores y cosechadoras, en el mismo período de 2013 las ventas aumentaron a 418 y se situaron en el nivel más alto de los últimos años, en el segundo trimestre de 2014 las ventas de esos mismos bienes cayó a 394, y entre abril y junio de 2015 se colocaron 221 máquinas, el nivel más bajo.

La comercialización de la maquinaria agrícola tiene mucho que ver con el comportamiento de los más entendidos en el rubro, los mismos agricultores.

Si un agricultor no moderniza sus herramientas es una señal inequívoca de que está previendo un escenario en el que la actividad económica no le devolverá la inversión, y piensa mucho si la hace o no.

SERVICIOS: TURISMO
La encuesta de actividad de la CNCS se detiene también en el sector servicios. La definición económica para servicios es que son todas aquellas actividades que se consumen en el mismo momento que se están generando.

Un ejemplo claro es el turismo, pero también un viaje en taxi, el uso de la telefonía, de la electricidad, una comida afuera, tomar una clase, y tantos otros.

El turismo es la herramienta vedete de los economistas que hacen seguimiento de la actividad económica en conjunto de un país. En Uruguay, hubo caídas constantes y acumuladas de la actividad turística en la primera mitad de 2015.

Entre enero y marzo la retracción del turismo fue de 4,4%, en tanto que entre abril y junio la contracción de esa actividad fue de 6,3%.

Los autores del estudio apuntan a la devaluación del peso frente al dólar como el principal factor que “en este último tiempo ha desalentado la actividad de forma notoria” para el turismo emisivo, es decir, para los residentes en Uruguay que viajan al exterior y encuentran todo mucho más caro.

La mirada para el enlentecimiento del turismo receptivo se detiene en otra herramienta: la ocupación de los hoteles en todo el país. En el primer semestre de 2015 el costo del alojamiento en hoteles de tres estrellas en Uruguay se abarató 13,7%, y los de cuatro estrellas 5%.

Pese a ello, el documento afirma que “las ventas de servicios de alojamiento en el conjunto de hoteles tres y cuatro estrellas mostraron nuevamente un deterioro en el segundo trimestre del año, profundizando la tendencia observada en el período anterior y reflejando las dificultades que atraviesa el sector”.

“Ante el aumento en la cotización del dólar (en rigor, la devaluación del peso), los operadores han optado por mantener e incluso reducir las tarifas en dólares, a pesar de que los costos de funcionamiento se han incrementado”, dice el documento.

Apunta que “la menor ocupación promedio ha llevado a un incremento en los costos fijos, al tiempo que el crecimiento en la oferta hotelera ha tendido a reducir las tarifas por habitación”.

“El esfuerzo realizado por el sector hotelero en cuanto a tarifas promocionales, muchas veces no es acompañado por otros agentes del sector turístico, con lo cual no tienen el efecto esperado”, afirma el documento, poniendo en evidencia una suerte de actividad comercial bajo la lógica de sobrevivencia.

CONCLUSIONES
El documento resume algunas de las conclusiones a las que llegan sus autores, como que “la actividad comercial está sufriendo un deterioro económico período tras período, producto de las condiciones desfavorables que imperan”.

Agrega que a causa de ese deterioro, aparecieron “desequilibrios a nivel interno” que achican los márgenes de reacción de los empresarios para salir de situaciones como la actual.

Este cuadro de situación ha deteriorado los niveles de competitividad del país a nivel regional y mundial, y eso va a impactar más fuertemente en la actividad y el empleo en los próximos meses.

“Por lo tanto, queda en evidencia que el sector comercio y servicios está atravesando un proceso de desaceleración importante el cual a su vez según el análisis de sus principales determinantes, se espera que se mantenga en el próximo semestre de 2015”, proyecta.

Sintetiza esos efectos en un “mercado laboral menos dinámico, niveles de poder adquisitivo que se reducen, y en consecuencia de ello menor nivel de optimismo y de avidez por el crédito”.