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Como se divulgó ayer, la justicia había ordenado retirar el arma de la mujer policía que resistió un intento de rapiña efectuando un disparo en la ciudad de San Carlos.

La Unión de Policías de Maldonado (Unipolma) por medio de un representante se reunió hoy con jerarquías de la Jefatura de Policía de Maldonado no por el retiro del arma, sino porque la funcionaria precisa otra para cumplir con tarea.

LO OCURRIDO
El incidente ocurrió a las 2:06 del domingo en la calle Carlos Reyles de la ciudad de San Carlos, cuando la mujer regresaba a su casa con su uniforme puesto.

En la intersección de esa calle con la avenida Rocha, la agente fue abordada por dos sujetos que circulaban en una moto. Uno de los hombres bajó de la moto y fue hacia la mujer, y ésta, que había advertido la presencia de los dos sujetos, extrajo la pistola que tenía en su poder y al dar la voz de alto disparó hacia el piso de “forma intimidatoria”. Los dos hombres huyeron del lugar con dirección desconocida. En tanto, la mujer realizó la denuncia correspondiente.

Por orden judicial, tuvo que entregar el arma y pasar por la prueba que busca restos de pólvora en la mano empleada para disparar.

El vicepresidente de Unipolma dijo que los policías optan por pagarse el pasaje en ómnibus y quitarse el uniforme para evitarse situaciones en las que no están seguros de tener respaldo.

UN LLAMADO DE ATENCIÓN
Entrevistado en FM GENTE esta mañana, el dirigente sindical dijo que este es “el primer caso” de un intento de rapiña a un agente, aunque ha habido robos de armas de reglamento. “Esto nos lleva a tomar precauciones mucho mayores”, ya que constituye “un llamado de alerta” para todos los funcionarios, indicó. Señaló que Maldonado está muy cerca de Montevideo y rápidamente se copian las modalidades delictivas.

Aclaró que, si bien llamó la atención la decisión judicial, “se malinterpretó un poco el tema del desarme de la policía”, porque lo que se dispuso fue hacer la pericia al arma. “Eso no significa desarmar ala efectivo policial”, precisó.

“Eso es normal”, se hace “en todos los casos” cuando un policía dispara, explicó. “Pero el efectivo no tiene por qué quedar desarmado. Inmediatamente se le puede proporcionar otra arma. Eso ya le compete a la propia Jefatura. Y eso se hizo esta mañana. A las 8 y media se le reintegró un arma de reglamento. Y la policía ya está cumpliendo las funciones como corresponde”, agregó.

Destacó que llama la atención, aunque se respeta, la decisión de la Justicia de analizar la mano de la agente, porque ella “desde el primer momento admitió que hizo un disparo al piso, intimidatorio”, que fue lo que determinó que los delincuentes no la rapiñaran y se dieran a la fuga.

Indicó que la funcionaria revista en la Seccional 2ª de San Carlos y, cuando acontecieron los hechos, estaba realizando lo que se denomina “Hora Ciudad” e iba vestida con el uniforme y el chaleco antibalas. Por tanto, los rapiñeros sabían perfectamente que se trataba de una funcionaria policial, apuntó.