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Ivoskus, que es presidente de la Cumbre Mundial de Comunicación Política, dijo a FM GENTE que para luchas contra una noticia falsa, después que fue lanzada, debe haber “un equipo de profesionales y una estrategia. Si la respuesta es más contundente, más escandalosa, más irónica, es la única manera de salir airoso. Depende de lo que estemos hablando”.

TRABAJO MINUCIOSO

“Hay que salir con algo contundente, que nos dé la posición de liderazgo, de contratacar, que nos dé la posibilidad de desenmascarar a quien lo hizo, cuáles fueron los motivos. Hay que hacer un trabajo minucioso para que, cuando se dé la respuesta, no sea solamente un bloqueo, o decir que es una ‘fake news’… Hay que ser mucho más contundente”, afirmó.

El escritor indicó que, en una campaña política, en un escenario “de noticia falsa hay que reunir la información… Primero, que el candidato apegue el teléfono y no haga ningún comentario en caliente. Esos minutos de silencio nos permiten pensar la respuesta continente, con mucha creatividad y salir al ruedo con una estrategia que posibilite tomar una posición de liderazgo. Una torpeza, como puede ser una ‘fake news’, nos da la posibilidad de retomar la agenda pública. No es fácil, pero hay que trabajarlo profesionalmente… Esto funciona y se consigue”.

También señaló que, “en este mundo de la desinformación”, hay que revindicar “muy fuerte, el rol del periodista”.

LA PRIMICIA Y EL SEGUNDO

“Los tiempos de la comunicación actual han cambiado eso de la desesperación por la primicia. Hoy ya no es tan importante ser el primero, sino ser el segundo y no equivocarte. Vuelve a tener relevancia la construcción de las audiencia”, con confianza y credibilidad. “Vuelve a ser importante quién lo firma, quien lo dice”, afirmó.

Precisó que no importa “el formato”, sino “las identidades. En el futuro todos vamos a tener una identidad digital, que va a dar la garantía de quién lo está diciendo y cómo”. Añadió que por eso “vamos a ver que personas que, aunque tengan un creciente número de seguidores rápidamente, puede ser para el ridículo, para el chiste… Depende de cómo se construya la audiencia, más allá del medio en el que uno esté”.

De todas formas, Ivoskus consideró que los dirigentes políticos, que están en plena campaña en Argentina y en Uruguay, “tienen que tener un equipo para el control de daños” que provocan este tipo de prácticas.