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El diputado Pablo Abdala (PN) reiteró que el Servicio 222 es factor de irritación importante en la situación de conflictividad que vive el ministerio del Interior, ya que se trata de un ingreso muy importante para los funcionarios, y los atrasos que se generan por parte de los organismos públicos, fundamentalmente, que contratan este servicio, se terminan trasladando al propio funcionario.
Abdala dijo que la ministra del Interior Daisy Tourné, durante su comparecencia reconoció esa situación con total claridad, pero “no asumió la responsabilidad y creo que en parte tiene razón porque la responsabilidad le corresponde a los organismos que no pagan”. Pero el legislador recordó que el problema es que las reparticiones que no pagan, pertenecen al mismo gobierno, aunque “en estos temas por supuesto todos tenemos que ayudar y ver de que manera esta situación se regulariza”.
Consideró que en este caso lo que hay que hacer “es endurecer la línea y buscar una solución drástica a esta situación, porque evidentemente así no se puede seguir. Los últimos paros que se han realizado por parte de la Policía, en una situación por cierto polémica; porque la detención de los servicios policiales conspira contra la seguridad pública, y por lo tanto es de dudosa legitimidad; pero los funcionarios llevados por la desesperación han apelado a este recurso en función de que inclusive el propio ministerio del Interior si bien no reconoce el derecho a la huelga, fomenta la sindicalización. Entonces se da una situación muy compleja donde el funcionario por un lado se muestra insatisfecho con su situación, y por el otro lado advierte que se le abre un campo para la acción sindical. Pero resulta que después el mismo ministerio que no le paga pero sí le dice que se puede sindicalizar, no lo deja parar”.

LOS PROBLEMAS DE LAS VACANTES
En torno a la problemática del ministerio del Interior para cubrir las vacantes, Pablo Abdala dijo que tiene que ver con los bajos salarios, ya que no solo no se producen los ingresos necesarios, sino que se registran decenas de bajas permanentes, “y eso evidentemente conspira contra la eficacia policial, porque si esas vacantes están previstas en el Presupuesto, es porque se entiende que son necesarias para cumplir con los cometidos”.
Recordó que había cierta expectativa con la Rendición de Cuentas en filas policiales, “que salieran mejor de lo que salieron, había expectativa de que la salarización (sic) del Servicio 222, es decir que el ingreso se compute como salario, que eso se regularizara a breve plazo, y parece que el tema está más complicado de lo que creíamos”. Esto, según la ministra Tourné, debería canalizarse a través de una reforma de la Caja Policial que está a estudio del Senado hace 3 años, “y que el Frente Amplio no aprueba”. Abdala recordó que por otra parte, ese servicio paga Impuesto a la Renta a pesar de ser un componente que está en negro.
Consideró que con este panorama, “estamos en una situación empantanada que yo creo que es complicada, pero algo hay que hacer porque sino, como los sueldos son tan bajos, los policías que están, están descontentos y los que no están no quieren entran”.
En cuanto a las condiciones laborales del sector, dijo que a partir de la sindicalización impulsada por el propio gobierno, se han potenciado los reclamos que se chocan con la postura oficial de no aceptar el derecho de huelga, “y lo que nosotros le hicimos ver es que para eso tiene que legislar, porque el derecho no es muy claro en ese sentido; entre otras cosas porque en el Uruguay estas situaciones no se habían planteado hasta ahora, aunque recordamos el paro que tuvo que enfrentar el gobierno del Partido Nacional; pero fuera de lo excepcional, nunca se había discutido esto como sistema”. En tal sentido, la ministra adelantó que incluirá una disposición en la reforma de la Ley Orgánica de la Policía, donde defina esta situación con claridad.
Redactado: R.A.