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“La realidad es que si no tomamos una medida que sea urgente, o sea, si no nos movemos rápidamente van a quedar muchos en el camino”, advirtió.

Agregó que “en Maldonado son aproximadamente 35 tambos, y unos 35 tambos en Rocha, más o menos”, pero “de los treinta y pico de tambos más o menos que hay, 28 tambos son familiares, y producen entre 1.000 y 2.500 litros más o menos”.

“En lo que va de 2017, la producción va con más de un 10% de baja con respecto al año pasado, si bien es cierto también que eso se da por varios motivos, uno, porque el número de tambos va disminuyendo lentamente, pero va disminuyendo, y también porque al no ser un rubro rentable la gente ya deja de invertir en comida, hace dietas más económicas, la producción es cada vez menor, y el estímulo es menor”, explicó.

LA ASAMBLEA
Noguez señaló que “ayer estuvimos reunidas todas las gremiales lecheras del país, de todo el país, representadas zonas como Maldonado, o que no son cuencas tradicionales como Cerro Largo y Salto y Paysandú, toda esa zona que no está en cuenca”.

“Y las cuencas tradicionales, como Florida, Colonia, Canelones; se reunieron prácticamente todas las gremiales para discutir un tema importante, la falta de liquidez de los tamberos, de los tambos”, detalló.

Añadió que “es sabido por todo el mundo que han subido las tarifas públicas, en el caso de los tambos, el combustible, el gasoil, la luz, son insumos muy importantes; ahora una nueva suba de salarios”.

“Todo eso repercute en un sector que ya venía un poco complicado, con un gran endeudamiento; para que se tenga una idea, se calcula que el endeudamiento con los bancos, es un poco superior a los 300 millones de dólares, de los cuales, el que habría que pagar en un año, es de 70 millones de dólares”, avanzó.

Dijo que “se juntó todo ese tipo de cosas, con un precio de leche que todavía no es un precio que dé para pagar los costos (de producción), y con esa sumatoria de situación se movieron todas las gremiales para plantear alguna medida, alguna estrategia a tomar para no seguir en esta situación complicada y que se pierdan más tambos”.


La resolución más importante, si se quiere, es el aplazamiento de los plazos, correr un poco, diferir más que nada el pago de los préstamos de corto plazo, en cierta forma, dar un poco más de respiro, de oxígeno, para poder hacer todas las inversiones en comida que en esta época en el tambo son muy importantes.

DIFERIR EXIGENCIAS POR DEUDAS
Noguez afirmó que “en otoño, ahora, en febrero, marzo, o abril, se realiza todo lo que es praderas, cultivos de invierno, y se produce la cosecha, todo lo que es sorgo y maíz para el invierno, es toda la comida que se junta para el invierno”.

“Y ahí se requiere una gran cantidad de dinero, por eso es que el productor aparte de eso tiene que pagar las deudas; bueno, lo que se pide, en primera instancia, es el diferimiento de las deudas, por lo menos, correrlas un poco”, indicó.

Sostuvo que “después, otro paso importante es conseguir alguna fuente de crédito rápido, algo de liquidez, lo más rápido que se pueda, para poder pasar el momento este que se está viviendo”.

“Hay productores que no pueden pagar la luz, no pueden pagar el gasoil, ayer era un poco crítica la situación de productores que decían que no atienden el teléfono porque los cobradores están…”, y no completó la frase.

Continuó: “Esteee, y bueno, uno tiene que mirar para adelante, no puede bajar los brazos, y tienen que invertir para adelante, porque si no, se tiene que cerrar el tambo”.

“Y la tercer medida que apunta más que nada a la industria, es un poco a mejorar el precio de la leche, porque todos los costos han subido, y el precio de la leche internacional se ha ido un poco mejorando, la situación ha ido cambiando lentamente, y queremos un poco más de precio para que sea un rubro rentable, y no trabajar a pérdidas”, aseguró.

Manifestó que “actualmente por lo menos precisaríamos, para que sea rentable, entre dos y tres pesos más (por litro de leche), por lo menos; todos sabemos lo que cuesta una Coca-Cola en el almacén, y lo que vale un litro de leche, que es alimento, en Uruguay la lechería ha sido un buque insignia de toda la vida”.

Explicó que mientras las empresas procesadoras se multiplicaron, la mayoría de los productores de leche enfrentan su producción con el grupo familiar: “Por supuesto que hay tambos medianos, y hay tambos grandes, pero la mayor parte de tambos son tambos chicos, son tambos familiares, trabaja la familia”.

“Ayer se hablaba que hay productores que no tienen ni para pagar la patente del auto”, graficó.

Al final, introdujo otra advertencia grave: “Diría que la mayoría de la gente está pasando mal, y el problema es que tenemos que tomar medidas urgentes, porque esto no se puede parar y la máquina tiene que seguir funcionando, y si no actuamos rápidamente, esta cadena se corta”.