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Se preguntó si es lo mismo un escenario con fronteras abiertas con Argentina y Brasil en la temporada que el actual. “Claramente, no”, respondió.

Manifestó Uruguay está “muy condicionado” por lo que pase en el mundo, en cuanto a las exportaciones de bines, y a lo que ocurra en la región por la venta de servicios, “y en particular por el turismo, que es la actividad por excelencia que se va a ver más castigada por esta situación”.

Soto agregó en el turno se va a tener un año “complejo en 2020. Y puede tener un impacto significativo en lo que es la zafra, la temporada alta de diciembre y enero de 2021”.

Recordó que “las divisas que entran por turismo son más que las de carne y soja juntas. Es el principal rubro de exportación del Uruguay. Son más de 1.500 millones de dólares por año”.

Sostuvo que Uruguay va a ser uno de los países más castigados, porque la diferencia de trismo emisivo y receptivo es una cuenta que tenemos a favor con el mundo, porque llegan más que los que se van. Y eso va a impactar en todo este movimiento. Por eso la incertidumbre, porque no está claro todavía el impacto de la pandemia en los vecinos”.

“En Brasil parecería empezar a moderarse el crecimiento del Covid. Sin embargo, el Estado más complicado todavía en materia de tendencia es Rio Grande do Sul”, apuntó.

“Y la evolución de Argentina se sigue de cerca. Sigue en estado complejo, en una situación muy delicada, más complicada que Brasil si la medimos en evolución per cápita”, añadió.

Asimismo, dijo que no hay que descartar que se imponga restricciones cambiarias, por la situación interna de ese país. “De todas maneras hay argentinos que vienen igual porque tiene su inmueble en Uruguay y sus recursos afuera… Pero es cierto que las restricciones cambiarias van a ser un impedimento”, aunque ya las ha habido y de alguna manera se fueron sorteando, admitió.

“Ahora, el impedimento decisivo acá es que se pueda mover en masa la gente, que las fronteras de algún modo estén abiertas”, resaltó.

Insistió que por tanto, “hay incertidumbres porque no está muy claro el desarrollo que pueda tener esto… Entonces, hay que abrir un gran abanico de posibilidades, algo a lo que los analistas no estábamos acostumbrados, porque Uruguay es un país más o menos previsible. Las variables tienden a mostrar cierta estabilidad y cierta previsibilidad. Y eso no está ocurriendo”, enfatizó.