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Destacó que Uruguay enfrenta un problema importante en el desempleo, que afecta principalmente a los jóvenes, y en este rubro, a las mujeres jóvenes. Consideró que esto debería determinar la aplicación de “políticas focalizadas”.

FLUJO DE INVERSIONES

Además, destacó que para revertir ese problema hay que generar un flujo de inversiones hacia la región y generar atractivos a nivel local. Indicó que si bien el país tiene ventajas sobre algunos de sus vecinos, hay menús más interesantes, como es el caso del que brinda Chile.

En ese marco, estimó que la situación generada por el coronavirus puede tener su impacto, aunque hay que ver todavía “como decanta”.

Por otra parte consideró que el nuevo gobierno no tendrá problemas a corto plazo para cumplir con los compromisos de deuda, por la posición de reservas que tiene el Banco Central, que supera largamente los 20 mil millones de dólares. Sin embargo, remarcó que hay que un problema de déficit fiscal, que se debería encarar por el lado de recorte del gasto, pues la presión tributaria ya es muy alta.

Soto consideró, no obstante, que no van ser fácil que el nuevo gobierno concrete su plan de ahorro de 900 millones de dólares, porque si bien hay sectores que esperan un señal en este sentido, hay otros que no lo quieren, incluso dentro de la propia coalición multicolor. Consideró que es importante avanzar en la reforma de la seguridad social, para lo que se está anunciando la creación de una Comisión de Notables, por la incidencia que tiene este rubro en el déficit global.

“Si Uruguay no lograr equilibrar sus cuentas públicas y equilibrar su déficit fiscal, la trayectoria de esa deuda puede convertirse en un problema a mediano plazo y convertirse en insostenible. Hay que tener cuidado y tomar medias concretas en torno al gasto”, advirtió.

PERSPECTIVAS PARA 2020 Y 2021

Consultado sobre las perspectivas, dijo que para 2020 se espera un crecimiento del 2%, una cifra “bastante mayor” que la de 2019, por el empuje de la planta de UPM. “Se espera un tipo de cambio de 41 pesos al cierre del año… Un desempleo que va a ser duro de bajar y va a estar en el entorno de 9,4 o 9,6%. Un déficit fiscal que se va a mantener en el entorno del 3%, sin tomar en cuenta el efecto de los ‘cincuentones’. Y una inflación que va a estar en el entorno del 8% para 2020”.

Agregó que en 2021, en función de lo que ha proyectado el Grupo Citibank, “nuestro Producto Bruto Interno subiría 1,7%, el tipo de cambio estará en el entorno de 45 pesos, el desempleo habría bajado algo, a 8,9, con un déficit del 2,2… Habría una mejora fiscal. Y una inflación todavía en el entorno del 7,5%”, remarcó.

Dijo que esta “foto” muestras que “Uruguay volvería a crecer en 2020 y en 2021, sosteniendo un ciclo expansivo que nunca conoció en su historia”, completando 17 o 18 años. Dijo que más allá de las discusiones sobre la composición de ese crecimiento, “esa es una buena noticia”, opinó.