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En Punta del Este, donde Morabito vivía con su hija quinceañera y su mujer angoleña, nadie sospechaba quién era. Y así logró mezclarse entre la sociedad del departamento manteniendo, casi siempre, un perfil bajo.

Tras una fachada de empresario exitoso y padre de familia, mantenía una doble vida. La Policía le incautó una pistola Glock 9 milímetros, 13 teléfonos móviles, numerosos chips de celulares, doce tarjetas de crédito y débito, cuatro chequeras en dólares diferidos, US$ 54.250 en efectivo, una libreta conteniendo acciones al portador por US$ 100 mil, dos vehículos y 150 fotos carné con diferente ropa y tonalidad de piel, como así también documentación de variada índole.

De acuerdo a información a la que accedió FM GENTE, Morabito y el conocido capo narco mexicano Gerardo González Valencia tenían cosas en común. No sólo vivían en el mismo barrio, a pocas cuadras de distancia, sino que también compartían el mismo hombre de confianza.

En efecto, un hombre residente en la zona oeste del departamento, de iniciales P.G., ofició de mano derecha de González Valencia y también del mafioso italiano, cuya defensa asumieron los abogados Víctor Della Valle y Alejandro Balbi.

De hecho, cuando fue detenido González Valencia, este hombre fue interrogado en relación a algunos cheques que habría cambiado para el mexicano.

Al momento no se ha podido establecer si Morabito y González Valencia se conocían. También si uno y otro conocían sus identidades reales y la actividad ilícita de la que fueron protagonistas. Pero la llamativa coincidencia es tomada en cuenta por los investigadores.

El Dr. Della Valle indicó este lunes al diario El País que Morabito se encontraba viviendo en el hotel porque hacía poco se había separado de su mujer. Según el Ministerio del Interior, llevaba un día alquilando la habitación.

Morabito vendió hace cuatro meses el campo de unas 600 hectáreas sobre el "Camino a la Calera de Igam", ubicado entre la ruta 9 y Laguna del Sauce. De acuerdo a las investigaciones realizadas por Interpol Uruguay, se dedicaba al arrendamiento de campos para producción, no tenía un ingreso fijo y la venta del establecimiento rural le generó un buen monto en dólares que le permitía subsistir. El predio, dedicado a la producción ovina y a la cosecha de soja, había sido adquirido años atrás por el italiano a una familia de Pan de Azúcar.

Con el correr del tiempo, el campo se convirtió no sólo en su lugar de trabajo sino también en el lugar donde recibió a muchos amigos, algunos de ellos empresarios y deportistas.

El campo fue finalmente vendido a unos compradores extranjeros, presumiblemente estadounidenses. La operación fue al contado y por una suma elevada, según trascendió en el ámbito inmobiliario del lugar.

De acuerdo a datos obtenidos por el diario El País, la hija de Morabito festejó el 7 de febrero sus 15 años en el conocido reducto portuario esteño de "Boca Chica" (su cumpleaños fue el día anterior). Al convite no sólo concurrieron los amigos de la adolescente sino también los padres de los mismos y algunos empresarios de la zona.

El festejo incluyó a los compañeros de clase de un centro educativo privado del barrio Pinares, de Maldonado.

El año llegó con novedades en materia educativa y el padre de la joven, hoy procesado y puesto a disposición de las autoridades italianas, acordó con su esposa que su hija continuara estudiando en el nuevo colegio internacional del balneario.

El italiano se negó a pagar al contado la anualidad. Por el contrario, quería abonar a mes vencido.

La casa del barrio Colinas del Golf sigue siendo ocupada por la esposa y la hija del capo siciliano. Así se lo hizo saber la mujer a los propietarios de la finca.



fuentes: El País y Prensa FM GENTE