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El facultativo dijo que, con la aclaración de ASSE –reflejada en FM Gente-, se pretendía “aclarar todas esas difamaciones e injurias que había trascendido en la prensa la semana anterior”.

Consideró que las manifestaciones del director de la Hemored de ASSE, el profesor Ismael Rodríguez Grecco intentaron “empañar la credibilidad y la confianza de una institución como el Hemocentro y de quienes trabajamos allí. Se manifestó que el director y los funcionarios vendíamos sangre”, recordó.

“Son declaraciones muy severas que dañan los ético, lo moral”, destacó.

Curbelo manifestó que “la confianza y la credibilidad, que es lo que nos ha resaltado a nivel internacional, la hemos conquistado en base a números, no por la linda cara nuestra. Sino a trabajo y a estudios científicos. Somos los únicos que en los últimos siete años hemos venido presentando tres o cuatro trabajos científicos en cada Congreso. Y con los resultados que hemos logrado”, expresó.

Consideró que “se trata de romper esa credibilidad”, pero dijo que “hoy el Hemocentro está lleno de donantes… Tenemos gente hasta en las escaleras. Ojalá sea una especie de rebeldía y se reacción a toda esta difamación, y sea una respuesta de la gente como diciendo: nosotros estamos y seguimos creyendo. Ojalá que sea eso”, manifestó.

Negó “enfáticamente” que él o el Hemocentro vendan la sangre, como se los acusó. “Eso está regulado por ley. Y la sangre es un bien púbico una vez que se obtiene” y “eso está terminantemente prohibido por ley”, precisó. De todas formas, señaló que ASSE tiene firmado convenios con los distintos prestadores, como el sanatorio Mautone, Cantegril, Comero de Rocha y Camcel de Cerro Largo, para proveer sangre en caso de ser necesario, pero hay un sistema de trazabilidad que impide la venta.

También aclaró que se descarta sangre, “como ocurre en el proceso de producción de cualquier producto que uno quiera imaginar”. Pero indicó que, entre otras cosas, el Hemocentro se creó para bajar el porcentaje de descarte, que antes de su existencia llegaba al 30%. “Y lo hemos logrado y con creces”, remarcó. El informe de ASSE establece que el descarte es de 3,7%, ratificó.

Asimismo, Curbelo admitió que los funcionarios cobran por las jornadas que realizan en el Hemobús, excepto que se trata de un empleado que deba estar cumpliendo su jornada laboral habitual. “Ahora, si lo hace como tarea adicional, no es que cobre horas extras… Cobra el adicional a la tarea que hizo en el Hemocentro… Si no, no tenemos como hacer funcionar el Hemobús, que es el Hemocentro sobre ruedas. Pero acá se dio a entender como que se inventaban las jornadas, se hacían por hacer, se sacaba sangre y por otro se tiraba y aparte se cobraba. Eso es una infamia”, afirmó.

“Si sucediera eso, era para denunciarnos donde fuera, porque seríamos delincuentes”, agregó.

Además, destacó que no hay donantes “de sobra”, como se ha dicho. “Para estar tranquilos, deberíamos tener unos 140 mil donantes al año para estar cubiertos y andamos en 110 mil”, destacó.

El director del Hemocentro también precisó que no es ilegal el convenio realizado con varias Intendencias para que no se cobre la libreta de conducir a quien dona sangre voluntariamente.

Curbelo señaló que está evaluando “las medidas a tomar” ante toda esta situación, incluso a nivel penal o civil, ya que está efectuando consultas al respecto con el abogado Jorge Barrera.

También anunció que se está pensando en hacer una campaña testimonial “muy fuerte”, con personas que digan “yo sigo confiando al Hemocentro”, con la participación de comunicadores, políticos y personas que han utilizado este servicio. Manifestó que el Hemocentro tiene sus puertas abiertas para que cualquiera que tenga una duda pueda despejarla.