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La funcionaria añadió que, además, se trabaja para que los pescadores reconviertan su fuente laboral y se dediquen a pasear turistas por el arroyo Maldonado.

La semana pasada los pescadores, representantes de la Junta Departamental y delegados de la Dirección Nacional de Recursos Renovables (DINARA) y de la Intendencia acordaron la redacción de un Plan Experimental. El documento establece que cuatro embarcaciones - Los Vagos, Magali, Fiorella y Lolo- serán autorizadas a pescar lachas hasta el 31 de enero próximo.
Las lachas se venden como carnada a los pescadores de embarcaciones del puerto de Punta del Este y debe extraerse a determinada profundidad y con redes de características específicas para no afectar el desarrollo de otras especies en el arroyo Maldonado.

Cristina Acuña, quien participó de las negociaciones, dijo a FM Gente que entiende la postura de los pescadores que claman por sus fuentes laborales perdidas, aunque subrayó que aún están dentro de los plazos acordados la pasada semana. Añadió que en la tarde de este lunes se comunicó con funcionarios de la DINARA, quienes le aseguraron que esta semana el titular de esa repartición, Daniel Montiel, enviará el Plan Experimental a consideración del ministro Berterreche.

Pasado el mediodía de este lunes el pescador Daniel Rodríguez señaló a esta emisora que, si no reciben una pronta respuesta de la DINARA, retomarán esta semana sus medidas de lucha y no descartan volver a cortar uno de los puentes de La Barra. El hombre dijo que es urgente una solución a este tema y que la situación ya es insostenible porque, al no poder pescar, carecen de dinero para hacer frente a los gastos de las familias.

DE LA PESCA A LOS PASEOS

La idea es que, mientras los pescadores usufructúan este permiso provisorio, en conjunto con organizaciones sociales y educativas se ejecute otro proyecto para su reconversión laboral. Acuña indicó que ese será el paso siguiente a la firma de este plan experimental y subrayó que ya hay un proyecto de reconversión en elaboración. Indicó que los hijos de los pescadores manifestaron su interés de reconvertirse, paseando turistas por el arroyo.

Para esto, dijo Acuña, se les pidió que realicen inventarios sobre los implementos de sus embarcaciones a fin de establecer qué se requiere para pasear a los turistas con seguridad. Además, se realizaron contactos a nivel educativo con la idea de que los pescadores puedan realizar cursos en el área de guía turístico o temas vinculados.

Por lo pronto, Acuña insistió en subrayar que los plazos tendientes a resolver este problema están “en tiempo y forma”. Recordó que este asunto estaba pendiente desde hace varios años y que en los últimos días se han logrado “importantes avances”.