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El empresario dijo que Solanas “se ha convertido en uno de los complejos más grandes de América Latina”.

Recordó que, cuando empezó con el proyecto, le llaman “loco” mientras caminaba por Gorlero. “Es que convocaba a amigos, a inversores, a inmobiliarias… Pero, lamentablemente, nadie creía. Cuando los traía para acá y bajábamos el lomo de la Ballena me preguntaban si íbamos para Montevideo. Además, estaba del lado adverso de la playa, con una ruta de por medio. Lo forestación que había era maravilllosa, pero la gente lo interpretaba como que ni se podían criar vacas en este lugar”.

“Empecé solo, poco a poco… Esto se ha convertido hoy en una empresa de familia, porque prácticamente no he conseguido ni un solo inversor que participe de mi ‘locura’”, agregó.

Por otra parte, Mochón dijo que hace poco mencionó que Argentina tiene un atraso en la complementación con privados para desarrollar proyectos de inversión. “Uruguay tiene 30 años delante de Argentina en ese marco, porque, precisamente, los regímenes de desgravaciones fiscales que permiten emprendimientos de gran envergadura son los que permiten de una y otra forma que el inversor privado pueda participar activamente”.

“El Estado, sin el sector privado, tiene una posibilidad muy endeble de crecer… El sector privado sin el Estado tampoco puede generar procesos de desarrollo y de crecimiento”, señaló.

Apuntó que, por ejemplo, “el turismo es una de las industrias más participativas en la generación de mano de obra y servicios, Por eso es fundamental considerar al turismo no como un elemento complementario de la economía de un país, sino que tiene el protagonismo que le están dando en todos lados, en Estados Unidos, en Europa, etc. La Organización Mundial de Turismo reconoce abiertamente que el turismo tiene una incidencia fundamental en el PBI de los países”.

Mochón resaltó que Solanas tiene “el protagonismo de generar actividad durante todo el año… Eso es porque este complejo le brinda a la familia tipo, con hijos de hasta 14 años, ámbitos apropiados para tener actividades de baja temporada, como son piscinas climatizadas, ambientes cerrados, saunas, jacuzzis… Ámbitos para que el invierno, que es lo que conspira en la estacionalidad, pueda revertirse. Por eso es que, cuando en Punta del Este no hay un alma por la calle, nosotros tenemos un 70% de ocupación”.

Informó que el nuevo proyecto de desarrollo, presentado en la Junta Departamental, va avanzado “muy bien. Tenemos plazo para el inicio de las obras… Son seis edificios sobre la Crystal Lagoon. Es un proyecto maravilloso y esperemos tener éxito en la comercialización”, resaltó.