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El comerciante apuntó que los vecinos están “en una isla porque Crufi y Cattivelli ninguno entra (al barrio)”. “Hicieron una rapiña el lunes, el miércoles otra y hoy otra más y ya no quiere entrar ninguno. Entonces agarraron (los ladrones) de rehén a un pueblo, porque acá viven miles de personas”, añadió.

El pasado lunes, los delincuentes robaron 75.000 pesos a repartidores de leche, al tiempo que el miércoles el monto hurtado ascendió a 45.000 pesos, según denuncia el vecino. Con respecto a la rapiña sucedida en la presente jornada señaló que no se tienen datos sobre cuánto dinero fue robado.

Cabe mencionar que en los comunicados policiales, no se revela información sobre los robos producidos ni el miércoles ni en la jornada de este viernes, aunque sí se detalla el sucedido el pasado lunes.

Según el comerciante, en La Capuera había “un solo policía”, lo que se vio modificado “ahora con todo esto” ya que llevaron a “algunos más”. Además, dijo que también “había un solo móvil” policial.

Luis aseguró que hoy les dieron (los repartidores) “la leche en la calle”, rompiendo de este modo “con la cadena de frío”. Aseguró que los comerciantes están “con miedo” y remarcó que el barrio antes “era tranquilo” pero que “ahora se relajó”.

También indicó que “ya se sabe quiénes son los que roban, pero no se hace nada”. “Los comerciantes estamos todos asustados, algunos están trabajando por atrás de las rejas. A pleno día. Todas las rapiñas han sido de día”, agregó.

Si bien los vecinos se han reunido con autoridades policiales, pretenden hacerse oír “para ver si el jefe de policía hace algo y pone más gente, para que nos cuiden”.

“Nosotros pagamos contribución, impuestos. Si pagamos es para que nos den seguridad, no para que hagan la vista gorda y miren para otro lado”, aseveró.