El exministro de Transporte y Obras Públicas,durante la administración del presidente Jorge Batlle Lucio Cáceres, criticó en forma muy dura el puente que se proyecta construir sobre la Laguna Garzón. El exministro envió una carta al semanario Búsqueda que la publicó este jueves, donde indicó que si se dan velocidades myores a 40 o 50 km “la funeraria local y la grúa de rescate tendrán mucho trabajo”.
“Un puente en curva circular tiene que tener en cuenta el efecto de la fuerza centrífuga y con ello establecer para un radio de curva dado y un peralte dado, la velocidad de circulación que evitará que los vehículos salgan por la tangente, en este caso en sentido estricto”, enfatiza en su misiva el ingeniero Cáceres.
Según sus cálculos, la velocidad máxima de circulación sería de 40 kilómetros por hora “para un peralte cómodo o 50 kilómetros por hora para el máximo de peralte admitido”. Aquellos que vayan más rápido tendrán consecuencias nefastas.
El profesional maneja la posibilidad de que algunos sigan de largo, -alertando -y “ni siquiera sientan la fuerza centrífuga, pues “sorprendidos por esta extravagancia, directamente seguirán su camino y caerán directamente”.
Agrega que “para enfrentar las presiones ambientales” se termina haciendo un puente “factor Pi veces más largo que el rectilíneo”, lo que termina haciendo que el puente sea “extraordinariamente” más caro.
Cáceres finaliza diciendo que para él sería mejor hacer una “obra racional y más económica, y la diferencia de precio, si estuviera disponible, destinarla a alguna de las causas ambientales, que sin recurso estarán destinadas a ser causas perdidas”.
El polémico puente proyectado sobre la Garzón, fue creado por el conocido arquitecto Rafael Viñoly. Sobre el diseño, el subsecretario del Ministerio de Trasnporte, Pablo Genta, explicó al portal de Presidencia que "se trata de una forma emblemática de laguna dentro de la laguna"; el puente funcionará como un acceso y a su vez observatorio, con zonas de tránsito peatonal destinadas a las prácticas recreativas y de contemplación del paisaje.
También se asegura la accesibilidad y pasaje de embarcaciones a la población local de pescadores.
Fuentes: Búsqueda y El Observador