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El legislador apuntó que el tema de las presiones por esa primera línea “es histórico”. “Ya en el primer gobierno de (Enrique) Antía ocuparon buena parte de ello con edificios de gran porte, en la primera línea de la (Playa) Mansa y de la (Playa) Brava y sobre el arroyo Maldonado y creo que esta es una nueva etapa, una nueva ofensiva del capital con una inversión de 120.000 metros cuadrados”, añadió.

De los Santos cree que “no es cierto que el edificio vaya a salvar el destino de Punta del Este” y apuntó que “puede llegar a arruinarlo” por la “forma en que está planteado”.

El diputado señaló que “muy posiblemente con esta presión se esté manejando un nuevo marco de especulación inmobiliaria” y sostuvo que “desde el punto de vista de las directrices del ordenamiento territorial está contraindicado en la primera línea contra el mar, en la altura y también en los volúmenes y cambia el perfil arquitectónico y urbanístico de la península”.

De todos modos y a pesar de las críticas, llamó a esperar “los estudios técnicos” ya que se trata de una “excepción muy grotesca” que “necesita mayorías especiales”.

A su vez, dijo esperar que “se trate de una forma muy abierta” y remarcó que “hay una manifestación muy rápida de vecinos que no tiene que ver con el Frente Amplio, que juntó casi 20000 firmas que demuestra que hay sectores que están dispuestos a defender un proceso de desarrollo de Punta del Este que no tiene que ver con estas características, sino la continuidad de un viejo modelo que logre equilibrios urbanos con el paisaje y con el entorno”.

“Los íconos no salvan a Punta del Este; lo salva la construcción de décadas que tiene”, agregó.

Además, el legislador indicó que “no hay ninguna excepción aprobada” en su gobierno “en términos de estas características”. “Nosotros hicimos un plan de ordenamiento territorial con la Universidad de la República, trabajamos dos años en talleres territoriales, en audiencias públicas. Recorrimos todo un proceso legal con el que cambiamos el territorio, la altura, pero para zonas que no era para un inversor tal, sino para una zona del departamento. Esto generaba reglas de juego claras, transparencias y el estímulo al inversor. Yo me temo que este tipo de excepciones, que ya se han agotado varias, no comiencen y terminen retrayendo al inversor serio. Espero que no estemos generando falsas expectativas”, indicó en entrevista con Radio Montecarlo.