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La legisladora departamental dijo que si bien hay diversos temas para encarar, a nivel nacional “lo que sobresale o el común denominador” es, “por un lado, la ineficiencia y la ineficacia que tiene el gobierno en administrar y, por otro lado, la pérdida de valores que hay en nuestra sociedad. Esos dos temas se cruzan y se hacen más notables en el tema de la seguridad, en la falta de políticas de seguridad que tiene este gobierno”.

“Este gobierno no tiene política de seguridad. Obviamente esta política tendría que depender de un equipo del Ministerio del Interior, pero este equipo tendría que estar respaldado por el presidente de la República, sosteniéndolo, así como a la acción, al actuar de este Ministerio. Hablamos de un Ministerio del Interior que tendría que tener como objetivo reprimir la violencia y los actos delictivos, así como también mantener el orden en nuestra sociedad”, afirmó.

“FRACASO” DEL MIDES

Zumarán indicó que “esta política de seguridad también tiene otra pata, en la que se ha fracasado notablemente, en la que ha fracasado el Mides, y es el desarrollo de la política de inclusión social. Y hablo de una política de inclusión social que nuestro país ha tenido toda la vida, porque la inclusión social no nació con el Mides, sin embargo, la causa de la generación de esta violencia en la que vivimos evidentemente no está siendo abatida o encarada por este Mides, que fue creado con el apoyo de todos los partidos políticos, que creo que ha fracasado notoriamente en cuanto a la inclusión social que tendría que llevar a cabo”.

“Hablamos de un Ministerio del Interior en el que, cuando comenzó esta política del Frente Amplio, tuvimos un ministro que tenía como objetivo liberar a los presos. Luego tuvimos una ministra que, cada vez que se hablaba de inseguridad, decía que era una sensación térmica. Y terminamos con un ministro que, cada vez que pasa algo, dice que la culpa la tiene la víctima: o sea, si a uno le roban la cartera, la culpa es suya por tener una cartera; si entran en tu casa, la culpa es tuya por tener una ventana abierta; y, si muere un policía, como ha sucedido, la culpa fue suya por no tener un chaleco antibalas”, destacó.

La edila oficialista también repasó los dichos del director Nacional de Policía, Mario Layera, y de otras autoridades del Poder Ejecutivo. Y manifestó luego que “hoy en el gobierno se aceptó que la política de seguridad y la de inclusión ha fracasado, porque el propio Gobierno así lo ha declarado. El tema es qué es lo que se hace y qué pasa con los uruguayos, porque acá no estamos hablando de números ni de partidos políticos, acá estamos hablando de la seguridad de las personas. Y hablamos de la seguridad de las personas, pero esto no es más ni menos que su libertad, porque estamos hablando de que el uruguayo no solamente tiene miedo a salir de su casa o de que sus hijos estén en la vía pública ‒en la calle‒, sino que estamos hablando de que el uruguayo no tiene libertad para desarrollarse, porque estamos totalmente metidos en el problema de la seguridad y sin una respuesta”.

EL DIAGNÓSTICO “ESTÁ HECHO”

“El diagnóstico está hecho; está hecho por la oposición, está hecho por el gobierno, está hecho por la Policía, está hecho por el Ministerio del Interior... El tema es ver qué se hace, porque estamos en una inercia en la que no se ven resultados. Decimos que hay recursos humanos y económicos; si uno rasca un poquito podrá ver que esto no se trata de partidos políticos, creo que es una cosa transversal que va más allá de ellos, se trata del Uruguay entero”, indicó.

“Y ese contrato social que tiene como base la sociedad uruguaya ‒para vivir en paz, para vivir en tranquilidad, para tener libertad, libertad para desarrollarse, libertad para poder trabajar tranquilos‒ se cruza con la pérdida de valores que hemos sufrido, como el hecho de saber que el trabajo dignifica, el hecho de saber que las cosas no me las dan porque sí. Creo que ha quedado demostrado que el asistencialismo no da resultados. Como se decía antes: no hay que darles el pescado sino enseñarles a pescar. Hemos tenido ya tres gobiernos con esta política que lo que ha hecho es aumentar la violencia en la sociedad y, a la vez, estar congelados”, afirmó.

Zumarán insistió en que “por un lado, tiene que estar la represión del delito y, por otro, vemos que ha fracasado rotundamente la integración social; falta ese relacionamiento entre el ministro del Interior y el agente policial, que este tenga la tranquilidad y la certeza de cómo y cuándo puede actuar; darle no solamente el respaldo moral sino también el jurídico, que no está claro. Escuchamos en la prensa que ya hay reformas al Código del Proceso, cosa que nos alegra, porque evidentemente no está funcionando bien.

“Creemos que llegó el momento no solamente de decir basta sino de ver, como sociedad, cómo cambiamos esto, porque ya no da para más. Esto no es una cosa que solamente pase en Montevideo y en Canelones, como estábamos acostumbrados, sino que todos los días en nuestro departamento escuchamos sobre la falta de seguridad y la gente realmente no lo soporta más”, agregó.