TRISTE DESTINO. A pesar de los numerosos proyectos y planes para aprovechar el antiguo Mercado Agrícola de la Ruta 39, la gris estructura de cemento sigue siendo un depósito de la Intendencia donde impera el caos. Allí se acumulan cientos de motos incautadas en operativos de tránsito y se acopian decenas de computadoras e insumos informáticos en desuso, entre cajones de madera abandonados por distribuidores de frutas y verduras en pretéritas épocas. Este jueves, un funcionario provocó un principio de incendio cuando usó una amoladora con la intención de cortar neumáticos de motos “enredados”, dijeron fuentes del lugar a FM Gente. La operación generó chispas y elementos cercanos tomaron fuego, aunque las llamas fueron rápidamente sofocadas.
La última de muchas iniciativas para dar un mejor fin a esta estructura y su predio circundante es una propuesta presentada a mediados de este año por comerciantes, que propusieron a la intendencia montar allí un centro logístico para barracas y aserraderos. Pero no hubo más novedades. (fotos: Martín Clavijo, FM Gente)