SIN AYUDA...Nicolás Maduro mostró al mundo que está dispuesto a todo, incluso a impedir que toneladas de alimentos y medicamentos alcancen los hogares del pueblo venezolano. La orden fue clara y demoledora: impedir el paso de la caravana humanitaria. Y aunque algunos miembros de las fuerzas de seguridad se rebelaron (unos 60 efectivos), la inmensa mayoría de ellos continúa respondiendo al régimen chavista. Reprimieron, al extremo de asesinar a sus compatriotas.
El costo que pagaron los venezolanos fue altísimo: cinco muertos y 275 heridos. Ningún camión logró traspasar la frontera. Nadie podrá recibir la asistencia tan esperada. El gobierno colombiano y la conducción de Juan Guaidó resolvieron retirar a los camiones del límite con Venezuela y regresarlos a Cúcuta.
Maduro, desde un estrado, desafió al presidente interino a llamar a elecciones y decidió expulsar a los delegados diplomáticos de su país vecino en menos de 24 horas, tensando las relaciones entre ambas naciones al límite.
Él mismo fue quien ordenó bloquear el ingreso de los camiones. Y sus hordas -uniformadas o en colectivos- incendiaron comida y medicamentos que estaban destinados a paliar al menos en una mínima proporción, el hambre y la desatención que padecen desde hace años las familias de cada extremo del país. Un pecado difícil de olvidar y que la historia le echará en cara con razón.
CAMIONES CON AYUDA HUMANITARIA QUEMADOS
Dos camiones con ayuda humanitaria que lograron pasar la frontera colombo - venezolana, por el Puente Francisco de Paula Santander, fueron incinerados por parte de las autoridades venezolanas. Los camiones iban cargados de alimentos y medicinas destinadas para la población venezolana. Luego de que las ayudas pasaron las barricadas conformadas por mujeres, y el último punto de control conformado por hombres, las autoridades venezolanas quemaron los vehículos que ya se encontraban en territorio del país vecino, mientras que un tercer camión logró devolverse hacia Colombia.
Por otro lado, no se registra ningún herido por quemaduras, incluyendo a los conductores de los camiones. (Varias fuentes)