Unos pocos clicks en una aplicación y lo que queremos consumir lo podemos tener sin movernos de nuestra casa. Eso es lo que representa PedidosYa para los cientos de usuarios que lo utilizan cada día. Pero ¿qué hay detrás del negocio? ¿Cómo es el sistema de reparto y quién ampara a sus trabajadores? Una reciente decisión judicial reconoció que existía dependencia laboral de un repartidor de Maldonado con PedidosYa y fijó un precedente en el departamento.
Escribe Paola Díaz
En teoría, PedidosYa funciona como arrendatario de servicios y así lo establece el contrato civil - no laboral - que los deliverys firman con la multinacional. Los repartidores tienen su propia empresa - unipersonal literal E, por la que pagan alrededor de 10.000 pesos por mes - y prestan sus servicios a la aplicación. En apariencia los trabajadores son "libres" y no están obligados a trabajar un mínimo de horas pero ¿cómo son las reglas del juego?
“Supuestamente trabajamos independientes, pero claro, trabajamos sobre reglas de ellos mismos”, explica un repartidor - que mantendremos en el anonimato - a FM GENTE.
PedidosYa funciona en base a un algoritmo y el sistema de asignación de horas se organiza en grupos del 1 al 5. Aunque la empresa lo niega, los repartidores aseguran que existe un ranking. “Es como una carrera”, ilustra el repartidor, y explica que depende de tres factores medidos semanalmente: horas trabajadas, horas planeadas y aceptación de pedidos.
Pongamos por caso, si un repartidor se enferma y no puede trabajar durante dos días quedará en el grupo 4 o 5 porque sus horas semanales disminuirán significativamente. Algo similar ocurrirá si pinchó la rueda de su moto y rechaza un pedido porque no puede entregarlo. No estará cumpliendo con la variable “aceptación de pedidos” y esto lo hará descender a los grupos de menor categoría.
También puede ocurrir que rechace un pedido porque no tiene el dinero para abonarlo. Esto es, si una persona hizo un pedido de 3.000 pesos que pagará en efectivo, el repartidor está obligado a contar con ese monto para levantar el pedido del comercio. Luego recuperará el dinero cuando se lo entregue al cliente.
No importan las razones por las que rechazó un pedido: es un algoritmo y no hay a quién explicarle los motivos.
No cumplir con las horas planeadas va en la misma línea, un imprevisto y el repartidor descenderá de grupo automáticamente: “Llegaste tarde un turno o te fuiste antes porque rompiste la moto o chocaste, lo que sea, y no cumpliste con todas las horas que elegiste ya te afecta porque te quedas en el grupo 4”, puntualizó el delivery.
Las penalizaciones del algoritmo escalan hasta el punto de suspender cuentas temporalmente y con esto no permitir que el repartidor pueda trabajar.
¿Cuáles son las ventajas de estar en los grupos mejor valorados? Estar en el grupo 1 permite elegir horarios laborales y cantidad de horas, lo que repercute en el nivel de ingresos. En los siguientes grupos va quedando lo que otros no eligieron. “Cuando vas a elegir turno en el 3 o en el 4, solo tenés lo que queda resaqueado digamos. Te ponen, no sé, San Carlos y tres horas nomás para trabajar de noche”, detalló.
Sobre eso argumentó: “En realidad trabajamos para ellos. No es que marcamos cuando queremos como tendría que ser si la empresa es tuya”.
Esa afirmación que el repartidor realiza durante su conversación con FM GENTE no es la que sostiene la empresa ni sus contratos. Y tampoco era válida para la Justicia, que recién hace poco más de un mes reconoció por primera vez la existencia de una relación laboral dependiente entre un repartidor y la plataforma.
Ese fallo histórico a principios del mes de noviembre, dictado en el Juzgado Letrado del Trabajo de 7° Turno de Montevideo, ordenó a la empresa a pagar a un repartidor un monto total de $ 1.884.444 por conceptos de licencia, aguinaldo, salario vacacional, horas extras y aportes.
El dictamen, del que dio cuenta El Observador, determinó que el sistema utilizado por Pedidos Ya “funciona como un sofisticado mecanismo de control conductual”.
La jueza Elena Salaberry alegó en ese entonces que la “capacidad de la empresa de desactivar unilateralmente una cuenta es la máxima expresión del poder disciplinario”, lo que se equipararía a un despido sin garantías.
La sentencia también señaló que el algoritmo “penaliza la inactividad, los rechazos de pedidos o las ausencias, afectando los ingresos del trabajador”, y entiende que son factores que constituyen “una manifestación moderna del poder de dirección del empleador”.
ACUERDO SIN PRECEDENTES
Hace casi un año PedidosYa suspendió la cuenta de un repartidor de Maldonado luego de que este compartiera en sus redes sociales un video de dos deliverys de la empresa “jugando una carrera de motos”.
“Obvio que estuve mal”, reconoce el trabajador en diálogo con FM GENTE. “Me merecía una sanción o algo, pero no, fueron y me cerraron la cuenta de un día para el otro”, añadió.
El repartidor inició un reclamo con el objetivo de determinar la existencia de una relación laboral y el pasado 23 de diciembre llegó a un acuerdo con la empresa tras meses de litigio.
El acuerdo judicial, tramitado en el Juzgado Letrado de 10° Turno de Montevideo, estableció que el gigante alemán Delivery Hero – dueño de PedidosYa – debe indemnizar al repartidor con el pago de los rubros licencia no gozada, salario vacacional, aguinaldo, despido común y liquidación.
El representante del repartidor, el abogado Camilo Silvera, dijo a FM GENTE que el acuerdo “es un precedente importante” porque reconoce que entre las partes “hay elementos de subordinación de trabajo común y corriente” y “abre una brecha importante para que se puedan ir presentando futuros reclamos”.
Foto: PedidosYa Blog