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Zumarán hizo una larga presentación, con exposición de videos que ilustraron su punto, para asegurar que en Uruguay es cada vez más común la existencia del denominado SAP, y afirmó que ella misma ha recibido denuncias de madres que están enfrentando este fenómeno en el departamento.

“Para hablar más en criollo este síndrome es algo que se ve todos los días en los casos de separación (de las parejas) y que es muy importante verlo desde el punto de vista jurídico cuando un juez tiene que decidir, sobre todo, en la tenencia de los hijos”, dijo.

Aclaró que “no es reconocido como síndrome propiamente dicho desde el punto de vista científico, no está reconocido por la Organización Mundial de la Salud como enfermedad”.

“En Uruguay no está legislado este síndrome; sí (lo está) en Chile, sí en México, sí en España; inclusive, en España hay ya sentencias de tribunales europeos” reconociendo esta anomalía de comportamiento de las parejas, expuso.

EN MALDONADO

Zumaránafirmó que “hay voces en contra de esto y eso lo quiero dejar claro; por ejemplo, la ‘Red uruguaya contra la violencia doméstica y sexual’ se ha manifestado en contra, dice que esto no existe, que esto es un invento y sobre todo dice que es una forma de manipular o controlar a las mujeres, porque muchas veces son los hombres quienes denuncian que las mujeres le lavan el cerebro a los hijos para que no vean a sus padres”.

“Yo quiero decir que no es lo que está pasando en Maldonado, tengo varias denuncias de madres que vinieron porque hace más de un año que no ven a sus hijos menores” a causa de la utilización de esta metodología que llamó “lavado de cabeza” del niño por parte del padre o madre que lo predispone contra el otro progenitor, dijo.

Comentó que ”es además increíble ver lo que pasa con los niños; los niños se convencen de que no tienen que ver al padre o la madre, al otro padre, y hacen suyos los argumentos del otro progenitor porque están convencidos de que la madre actúa mal y manifiesta que no quiere ver a su madre, por ejemplo, y no hay causas valederas para esto, sino que es el famoso lavado de cerebro”.

“Creo que esto no es una cuestión de género, es una cuestión de defender al niño, de proteger al niño en ese derecho que tiene de relacionarse con sus dos padres”, opinó la legisladora departamental nacionalista.

Sostuvo que hay que “mirarlo desde el punto de vista del niño: estamos diciendo que esto es un derecho fundamental del niño mantener relación con ambos padres, y por eso el spot (afiche, imagen) decía ‘Los padres se divorcian, los niños no’, porque en definitiva se está trasladando al niño el problema que hay entre los padres”.

A LOS JUECES QUE SEPAN DETECTARLO

Zumarán dijo que “nos importa que los jueces de familia de nuestro país sepan detectarlo, lo tengan en cuenta, y fallen en consecuencia”, en los litigios de parejas por la tenencia de los chicos, los regímenes de visita y de acompañamiento en el crecimiento de los vástagos.

La edil ubicó el reclamo a los jueces en la misma exposición en la que admitió que en Uruguay no existe legislación sobre estos comportamientos, pero los alentó a utilizar el conocimiento de la existencia del tema, con los apoyos que dijo tienen en el Poder Judicial, de psicólogos, asistentes sociales, y otros técnicos, para darse cuenta cuándo está ocurriendo esto en un caso que tienen para resolver sobre el futuro de vidas humanas.

“Y que se apuren en estos fallos porque se tardan meses en fallar sobre la tenencia de los hijos y mientras ese hijo es víctima de este síndrome se puede terminar poniendo en juego la integridad moral del niño”, se quejó.

Al final insistió sobre los dos puntos que consideró centrales: “En lo personal creo que es muy importante que se legisle sobre esto, hay un vacío legal en nuestro país, y que los jueces tengan en cuenta que existe (este síndrome), que lo detecten”.