En la audiencia que se llevó a cabo este martes, Fiscalía realizó la acusación para los tres imputados en la causa. Para los dos argentinos pidió 8 años de prisión por los delitos de copamiento, lesiones personales y privación de libertad. Por los mismos delitos, pero en calidad de coautora, pidió 9 años de prisión para la mujer. Las defensas tendrán 10 días para responder la acusación.
El fiscal Jorge Vaz solicitó una condena de 8 años de penintenciaría para los dos argentinos que en la madrugada del 10 febrero ingresaron a una vivienda ubicada en la calle Horneros, del barrio Maldonado Park, ataron de pies y manos a su propietario, lo amenazaron con un cuchillo, lo golpearon y exigieron su dinero.
Los dos hombres, de 18 y 32 años, vinieron desde Buenos Aires a cometir el delito que fue planeado por un tercer argentino que mantenía una relación por chat con la esposa de la víctima.
Según la acusación de Fiscalía, los hombres ingresaron a la vivienda que se encontraba sin tranca porque la dueña de la misma la había dejado abierta para que ellos pudieran entrar. Así como les proporcionó un cuchillo que les dejó detrás de una maceta ubicada en el frente de la casa.
En el hogar también se encontraban los dos hijos de la pareja y la madre de la víctima, quienes no se enteraron de lo sucedido.
El fiscal solicitó este martes a la jueza Sylvana García un proceso simplificado con el que estuvieron de acuerdo los abogados defensores de los argentinos pero no la defensa de la mujer.
El abogado de la imputada señaló que la misma no asume responsabilidad en los hechos y que fue una víctima más. Alegó que la mujer, de 36 años, sufrió extorsión por parte de estos hombres, que los mismos integran una “banda mafiosa”, y que la amenazaron de muerte a ella y a sus dos hijos.
Jorge Vaz enumeró todas las pruebas recabadas que daban cuenta de la participación de la imputada en los hechos y señaló que los hombres acusados revelaron que la misma cobraría el 40 % del botín.
Los delincuentes se llevaron dinero en efectivo, $ 15.000 y US$ 2.500, tarjetas de crédito con saldo de $ 90.000, dos celulares y la llave de un auto.
El propietario de la vivienda recién pudo denunciar los hechos a la 7 de la mañana, luego de estar cuatro horas privado de libertad, según relató Fiscalía.
Tras un trabajo de Inteligencia, los argentinos fueron detenidos en el puerto de Colonia cuando pretendían viajar a Buenos Aires.