Fiscalía investiga una denuncia de violación contra una trabajadora sexual, radicada la semana pasada.
Como informó FM GENTE, un hombre contactó los servicios de una trabajadora sexual a través de una página de escort, el pasado 27 de noviembre sobre las 8 de la noche.
Acordaron que él pasaría a buscarla y la llevaría hasta su casa, presuntamente ubicada en La Barra. Durante el trayecto, el hombre propone realizar un desvío “porque le quería mostrar algo”. En un momento detiene el vehículo en las inmediaciones del parque El Jagüel y, luego de bajarse de la moto, sin mediar palabra “la agarra del pelo, la mete para adentro del campo, le empieza a pegar, la tira al piso, ahí es cuando la viola”, contó a
FM GENTE Florencia, amiga de la denunciante.
“Mientras la viola le coloca una bolsa en la cabeza para asfixiarla”, relató, y puntualizó que le colocó y le sacó la bolsa en varias oportunidades mientras le decía “vos de acá no te vas, vos ya sos un angelito puta”.
Florencia contó que su amiga logró visualizar que al lado de ellos había una bolsa de arpillera a la que se le sobresalía un mango. “Estamos seguros que era una pala lo que había ahí”, precisó.
La mujer logró escapar y salir corriendo hacia la ruta. Lo hizo desnuda ya que el agresor le había sacado la ropa y la había desperdigado por todos lados. Un hombre que pasaba por el lugar la socorrió y la trasladó a un centro de salud.
DENUNCIAN QUE NO ES UN CASO AISLADO
Florencia señaló que ese hombre - que ya tienen identificado – suele ingresar a páginas web de trabajadoras sexuales, “solicita los servicios y con todas las chicas hace lo mismo”.
Dijo que a partir de divulgar lo sucedido con su amiga, donde publicó en una historia de Instagram el número de teléfono del agresor, varias mujeres se contactaron con ella diciendo que habían sido víctimas del mismo hombre.
“Arrancan a escribirme montones de chicas que no las conocía, todas me cuentan lo mismo. Este número las citaba, las llevaba a inmediaciones del Jagüel o a la parada 42 de La Mansa, y a todas les pasaba lo mismo. El tipo llegaba, les ofrecía grabarlas, algunas le decían que no, otras le dijeron que sí por un poco más de dinero. Se ponía agresivo, les pegaba, las violaba, grababa la violación, y las intentaba asfixiar”, detalló.
La investigación del primer caso está bajo la órbita de la Fiscalía Especializada en Violencia basada en Género, Doméstica y Sexual de San Carlos.
Policía aún no ha confirmado que a raíz de este caso otras trabajadoras sexuales hayan radicado denuncias por abuso sexual.
Foto: imagen ilustrativa