La propiedad, valuada en 11 millones de dólares, iba a ser vendida a un matrimonio estadounidense, pero la operación fue frenada por una medida judicial solicitada por un empresario que reclama una importante suma de dinero al conductor.
La chacra que Marcelo Tinelli posee en José Ignacio quedó embargada en las últimas horas a raíz de una denuncia por extorsión y una demanda millonaria presentada por un empresario vinculado al mundo de la televisión argentina.
La propiedad, valuada en 11 millones de dólares, había ingresado en una etapa avanzada de venta. Según trascendió, un matrimonio de origen estadounidense ya había entregado una seña de 1,5 millones de dólares para cerrar la operación.
Sin embargo, antes de concretarse la escrituración, la justicia actuó a partir del reclamo de este empresario, quien sostiene que Tinelli mantiene con él una deuda que supera los 11 millones de dólares. El monto habría aumentado con el tiempo, según informó Luis Ventura en América TV.
La medida judicial frenó la venta y dejó embargado el inmueble, lo que compromete la operación inmobiliaria con los compradores extranjeros.
El objetivo de Tinelli era utilizar los fondos obtenidos por la venta para saldar la deuda reclamada. Con el embargo en curso, no solo se interrumpe la transacción sino que también se profundiza el conflicto legal entre ambas partes.
Tinelli en su cuenta de X cuestionó la forma en que se expuso el conflicto en los medios. “Sigue el tema en un canal que sentía como mi casa. Pero entiendo que ahora, como este señor es dueño, hay que bancarlo”, afirmó. Aseguró que los montos informados no son correctos y que el objetivo del empresario “es dañarme en mi imagen y sacarme todo lo que pueda”.
En sus declaraciones, el conductor dejó entrever que se trata de un ataque con motivaciones personales más que económicas. “Compró una deuda de San Lorenzo solo para ir contra mí. Averigüen la ‘Mutual’ a la que le compró esta deuda. No tiene escrúpulos y lo único que busca es que me convoque o le entregue los bienes de mi familia. No lo voy a permitir".
Finalmente, se refirió a los señalamientos públicos que lo acusan incluso de extorsión. “No paró de mentirme nunca y siempre me dijo que confiara en él. Por atrás, su abogado seguía embargándome en Rosario. Mi dinero y el de mi familia lo gané trabajando, y lo voy a defender contra quien sea, con uñas y dientes, ante tanta injusticia".