El Departamento de Delitos Informáticos logró ubicar a dos de los implicados en una estafa, realizada a través del correo electrónico, y por la cual a un sexagenario le quitaron más de 700 mil pesos. La justicia condenó a una pareja y además, ordenó que se le reintegrara el dinero recuperado, algo más de 300 mil pesos, y varios efectos que habían sido comprados por los estafadores con el resto del dinero.
El pasado 6 de mayo un hombre de 61 años denunció que su cuenta bancaria había sido vaciada. El monto del dinero hurtado ascendía a los $710.000, por lo que inmediatamente se solicitó el apoyo del Departamento de Delitos Informáticos perteneciente a Interpol.
Tras dialogar con la víctima se pudo constatar que días atrás había recibido un correo electrónico donde le solicitaban que ingresara sus datos personales, ya que su cuenta estaría por caducar, a lo que la víctima hizo caso. De esta manera entregó toda la información a un tercero que, en realidad, no tenía ninguna relación con la entidad bancaria.
El Director de Interpol, Crio. Gral. (R) Juan Rodríguez, en diálogo con la Unidad de Comunicaciones del Ministerio del Interior, recordó que “las entidades bancarias nunca solicitan datos personales ni contraseñas a través de correos electrónicos”.
Al día siguiente de recibir la víctima el correo electrónico, los estafadores ya habían procedido a retirar todo el dinero de su cuenta.
La policía entonces comenzó una investigación que le permitió identificar la cuenta destinataria del dinero y a su propietaria. Mediante el análisis de las cámaras de seguridad de la entidad bancaria se pudo ver a la posible autora extrayendo dinero del cajero automático momentos después de concretada la estafa.
Orden de allanamiento mediante, la policía se dirigió al domicilio de la persona identificada donde se detuvo a una pareja vinculada al hecho.
Tras ser puestos a disposición de la justicia se dispuso la condena de Rosibel Rivero Matías
(53), como autor de un delito de receptación, a la pena de 6 meses de prisión a cumplirse bajo el régimen de libertad a prueba.
Asimismo fue condenada Susana Beatriz Cal Ramos (51) como coautora de un delito de estafa a la pena de 12 meses de prisión a cumplirse bajo el régimen de libertad a prueba.
Por otra parte, la jueza dispuso que personal de Investigaciones acompañara a S.B.C.R. al banco para que firmara una autorización de transferencia del dinero que posee en su cuenta y que se hiciera entrega a la víctima de todos los efectos que fueron adquiridos con el dinero retirado de su cuenta.
Además, a la víctima se le hizo entrega de 300.234 pesos uruguayos.
foto: Ministerio del Interior