El escritor peruano MarioVargas Llosa alerta sobre la necesidad de defender libertades que creíamos eternas frente a los fundamentalismos que buscan polarizar nuestra sociedad. El ganador del premio Nobel de Literatura 2010, se encuentra en Punta del Este, donde brindó, este fin de semana, una conferencia en el Hotel Conrad. También se refirió a la situación de Argentina en otro reportaje donde dijo que “El fracaso de la Argentina tiene un nombre: el peronismo”.
El escritor peruano, autor de famosas y célebres obras como "Pantaleón y las visitadoras" o "La ciudad y los perros" , ha sido invitado a Punta del Este por un banco internacional para que brindara una conferencia para 950 personas que ingresaron con invitación exclusiva este viernes en el hotel Conrad.
Frente a los hechos ocurridos en Francia, la Radio Francesa Internacional (RFI) a través del periodista Carlos Herranz mantuvo una entrevista con Vargas Llosa, la cual reproducimos a continuación.
(RFI): Imagino que usted, una persona tan vinculada a Francia y a la libertad de expresión, siente en estas horas de una forma especial todo lo que está sucediendo en Francia a raíz del atentado contra el semanario Charlie Hebdo...
Vargas Llosa: Sin lugar a duda. Es un acto de barbarie que me ha conmovido. Quiero mucho a Francia, el primer país en el que hubo una carta de derechos del hombre, defendiendo entre otros derechos el de la libertad de expresión, una tradición fuertemente arraigada en Francia. Hay que ver detrás de esta barbarie un odio hacia lo que representa la civilización de la libertad, de la coexistencia pacífica, del derecho de crítica, que es precisamente lo que han querido castigar. Creo que es importante no sólo protestar y exigir un castigo ejemplar a los asesinos, sino, sobre todo, tomar conciencia de que esas libertades, que hacen esa superioridad de la cultura democrática sobre el fanatismo, están hoy en día amenazadas por grupos que están dispuestos a usar las peores formas de violencia para acabar con ellas.
¿Qué respuesta espera usted de la sociedad francesa, incluidos los medios de comunicación en días de luto como éste?
Tengo la impresión de que la reacción ha sido unánime, con la indignación debida. Una reacción muy comprensiva por lo multitudinaria, pero al mismo tiempo creo que puede tener unos efectos políticos muy negativos. Seguramente el Frente Nacional pueda beneficiarse de la indignación. Y seguramente, esto es lo que buscan los fanáticos: polarizar las sociedades occidentales y darle mayor fuerza a los extremistas, que son, a su manera también, enemigos de esas libertades.
¿Usted cree que la estrategia de aislar al Frente Nacional de manifestaciones como la del próximo domingo, de unidad nacional y repudio al ataque, puede ser contraproducente?
No creo que lo puedan aislar. Ha crecido mucho, y es una realidad a la que hay que combatir dentro de la legalidad, con ideas, argumentos, razones…Mostrando que el extremismo no es bueno para la democracia. El extremismo puede acarrear consecuencias funestas; la fragmentación de la sociedad. Los extremistas piensan que estas divisiones debilitan a lo que ellos consideran el “enemigo”.
Decía Stéphane Charbonnier Charb, el director asesinado de Charlie Hebdo, que "hoy hay menos censura que antes, pero la autocensura es más fuerte.” ¿Coincide con el diagnóstico? ¿El mejor triunfo de los fundamentalistas es la autocensura?
Es muy cierto. El crimen busca provocar la autocensura, esa sensación de peligro frente a lo que escriben. Y a esto hay que responder con mayor énfasis y claridad en los principios de la civilización, que son los mismos principios que sacaron al mundo de la barbarie, de la violencia… Creo que es indispensable una movilización en defensa de esas libertades, justamente, ejercitándolas.
La irreverencia y la sátira, ¿deben ponerse algún límite? Y en caso de que así fuera, ¿dónde deben estar?
La irreverencia forma parte de los derechos del ciudadano para expresarse. Es una manera de ejercitar la crítica que tiene un enorme alcance. El humor trasciende a las culturas. Es un derecho a defender. El derecho a criticar no sólo a partidos políticos, a los representantes del pueblo, también a las religiones. El derecho a criticar las religiones debe ser fundamental.
Pero a lo mejor limitar el debate a la libertad de expresión en cuanto a lo que ocurrió ayer sería reducir el ángulo.
¿Intenta el fanatismo apropiarse de ciertas conquistas que nos costaron siglos y que a lo mejor ahora no hemos sabido defender desde nuestros valores?
Hemos dado por hecho que las libertades de las que gozábamos en nuestras sociedades eran eternas, y no es así. El horror ha entrado y el enemigo está en casa. Ahora bien, es importante que esto no nos lleve a limitar nuestras propias libertades pensando que es la mejor manera de defenderse. Todo lo contrario. Sería dar al enemigo la victoria si practicamos la autocensura, por ejemplo con la idea equivocada y demagógica de que hay que respetar incluso lo que tengan de dogmático y de fanático las culturas. Nosotros nos hemos liberado a través de luchas que han durado siglos y que han tenido muchos sacrificados, de esos dogmas. Hemos conquistado unos valores, y eso hay que defenderlo con la máxima energía y firmeza pero siempre dentro de la legalidad, porque eso es lo que nos da superioridad respecto a las culturas totalitarias.
Si usted fuera el director de una gran periódico, ¿Cuál hubiese sido su portada en un día como hoy?
Sin ninguna duda, hubiese reproducido en la primera página todas aquellas caricaturas alusivas a Mahoma, justo las que más han irritado a los fanáticos y asesinos de los caricaturistas de Charlie Hebdo. Esa sería la mejor respuesta. Como dicen los franceses en estas últimas horas , yo ahora también me siento en la necesidad de decir: “Yo también soy Charlie Hebdo”.
Vargas Llosa: “El fracaso de la Argentina tiene un nombre: el peronismo”.
Otras de las entrevistas pactadas por los organizadores que trajeron a Punta del Este al premio Nobel de Literatura, fue con el periodista Andres Oppenheimer . En este caso abordó temas vinculados a la política Argentina y aspectos regionales.
El reportaje fue publicado por el portal INFOBAE de Argentina, y reproducimos parte del mismo.
"Tengo una gran admiración por Argentina -confesó-. Siempre recuerdo, y me gusta recordarles a quienes ya lo han olvidado, que fue un país del primer mundo cuando tres cuartas partes de Europa eran del subdesarrollo".
El intelectual indicó que el país a comienzos del siglo XX la Argentina "tenía un sistema educativo que fue el mejor del mundo" y fue el primer país que acabó con el analfabetismo.
"Argentina fue un extraordinario país, con una cultura asombrosa. Fue la nación más ilustrada de América Latina", insistió. Y entonces se preguntó: "¿Cómo es posible que un país con esa tradición viva la catástrofe política y económica que es hoy día?". De inmediato dio con la respuesta: "Por razones puramente políticas, no son razones económicas, nadie ha invadido Argentina".
Vargas Llosa fue claro en identificar lo que a su juicio torció el destino del país: "La razón del fracaso, de la catástrofe Argentina, tiene un nombre: es el peronismo. No hay ninguna duda, es el peronismo".
Fue entonces que reflexionó: "No se comprende cómo existen argentinos que sigan votando" por el peronismo. "¿Cómo es posible esa perseverancia en el error? No se entiende", ahondó.
Reconoció luego su "esperanza" en que las elecciones presidenciales de octubre resulten en un "cambio" y que " el peronismo sufra la derrota que merece". Y no ocultó su favoritismo por uno de los candidatos: el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri. "Queridos amigos argentinos, no se equivoquen una vez más: ¡voten por Macri! Voten por Macri. Yo estoy dispuesto a hacer campaña por Macri".
Durante la entrevista, el escritor y ensayista fue consultado acerca de si la caída del precio del petróleo derivará en el fin del ciclo del gobierno bolivariano en Venezuela.
El panorama que dio sobre la realidad que enfrenta ese país fue por demás sombrío. "Hace 10 años el chavismo era una alternativa, que presentaba la utopía del igualitarismo y el estatismo que podía seducir a las mayorías. Hoy ese peligro está totalmente descartado. Venezuela es una catástrofe, un colapso económico con el segundo índice de criminalidad más alto del mundo". Y aseveró que "Venezuela se ha empobrecido con el chavismo".
De todos modos, evaluó que esa fuerza está cada vez más debilitada. "El apoyo popular al chavismo es minoritario. (Nicolás) Maduro solo puede ganar las elecciones con un fraude descomunal, crímenes, injusticia, encerrando a los opositores, destrozando la libertad de prensa", afirmó.
"A esta altura, la mayoría de los venezolanos sabe que el chavismo ha sido una mentira y una catástrofe. Una dictadura que ha fracasado estrepitosamente. Así como cayó el muro de Berlín, la dictadura de Maduro va a caer, ojalá que caiga pacíficamente; si no, va a caer por las malas. No porque lo impulsen los designios imperialistas de los EEUU, sino por la angustia, la insatisfacción, la indignación de la gente en Venezuela", dijo. Y observó: "Es una vergüenza que gobiernos democráticos no denuncien la dictadura, o peor, que se manifiesten solidarios con Maduro en lugar de con los verdaderos demócratas venezolanos. Maduro es un dictador corrupto y asesino".
Foto:NA