Un hombre que fue intervenido varias veces por un caso de violencia doméstica en Piriápolis, desacató la orden judicial de acercamiento a la víctima. Por los tanto, ahora deberá usar una tobillera electrónica, según dispuso la Justicia.
El juez Penal de 4º Turno dispuso la condena de un hombre de iniciales C.A.P.N. de 26 años de edad, como autor penalmente responsable de un delito de desacato por incumplimiento de medida cautelar en reiteración real con un delito de violación de domicilio agravado, a la pena de seis meses de prisión, con descuento de la detención sufrida, la que será cumplida en régimen de libertad vigilada intensiva, debiendo cumplir la obligación de residir en un domicilio específico, la prohibición de acercamiento y/o comunicación, todas las prohibiciones por el término de 180 días y la imposición para el contralor de las prohibiciones colocación de dispositivo electrónico tipo tobillera.
Esta medida fue impuesta por la justicia tras varias intervenciones del ahora imputado y su ex pareja, realizadas en la Unidad de Violencia Doméstica y de Género de Piriápolis.
Previamente se habían resuelto medidas cautelares de prohibición de acercamiento a la víctima, las cuales no fueron respetadas.
Se informó que el victimario se presentaba en el domicilio de su ex pareja en actitud agresiva e ingresaba a la finca por la fuerza, por lo que fue detenido y conducido, nuevamente, ante la justicia.