Este domingo, entre los proyectos a consideración para el presupuesto participativo del municipio de Maldonado, Cerema busca lograr concretar un importante plan que está dirigido a personas con daño cerebral. El 65% de los pacientes que se han atendido en el centro presenta este tipo de secuelas tanto por accidentes cerebro-vasculares como por traumatismos producto de la siniestralidad en el tránsito.
El director de Cerema, Hugo Núñez, explicó en FM GENTE el alcance de la propuesta que se votará con el número 7 el próximo domingo.
Núñez puso énfasis en que el centro ha realizado un estudio analítico de las discapacidades que presentan las personas que atienden y éste ha mostrado que el 65% de la población con discapacidad severa, que demanda atención en rehabilitación, tienen daño cerebral consecuencia de accidente cerebro vasculares o por traumatismos encéfalo craneanos graves producto de la siniestralidad en el tránsito.
Estas situaciones determinan discapacidades de alta complejidad, que requieren la asistencia de un equipo de profesionales capacitados en áreas muy específicas pero que también requieren de tecnología de alto costo.
El profesional también recordó que muchas veces se tiene que recurrir a tratamientos en el exterior del país, que están al alcance de la mayoría de la población y que por ese motivo el proyecto de Cerema apunta a que los pacientes del centro puedan acceder a ese tipo de cuidados.
El proyecto tiene un costo aproximado a los 230.000 dólares y que Incluye imaginería motora gradual, desarrollo de software específico, adquisición de equipos médicos de alto nivel tecnológico, incluyendo un soporte robótico para la re-educación funcional del miembro superior (brazo y mano) en pacientes hemipléjicos.
Asimismo, el equipo de Cerema ha trabajado para reducir los costos globales y así poder transformarlo en viable en la práctica y desde el centro poder plasmar una propuesta terapéutica más adecuada a este tipo de discapacidades.
Pero el plan también permite trabajar en el campo de la neurociencia y de esa forma diseñar nuevas y específicas propuestas terapéuticas.
Núñez recordó que en el campo de la salud las propuestas son costosas pero recordó que las personas con discapacidad merecen poder acceder a tratamientos de alta complejidad para recuperar la mayor funcionalidad posible.