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“De todas formas, el niño es la víctima principal”, destacó.

Luis indicó que no se pretende “criminalizar” el rol de las mujeres, aunque en algunos casos “la Justicia parece ponerse del lado de la madre, en forma indiscriminada, sin considerar hechos de aislación que generan, por falsas denuncias, no presentación a las audiencias, el anuncio de enfermedades… Y se vulnera el vínculo normal con su padre, y el resto de la familia… No estamos refiriéndonos a casos cuando los padres pueden estar impedidos por los límites que la ley plantea, por hechos de violencia u otra índole”.

También indicó que, en este caso, está establecido, por acuerdo, un régimen de visitas “bastante generoso” y con las obligaciones económicas del caso para el padre. “Pero después, en los hechos, eso no se cumplió por parte de la madre, que, sistemáticamente, ha encontrado excusas para que el padre no vea al niño”.

Apuntó que si bien pueden hacerse denuncias por el incumpliendo, a veces ese trámite, que debería resolverse en 6 días, se prolonga y puede llegar hasta un mes. “Y el padre no supo de sus hijos. Y el niño no ve a su padre en todo ese tiempo. Y en algunos casos los niños no saben por qué el padre no lo está viendo, aunque estén enfermos, sea su cumpleaños o se realice la fiesta de fin de cursos de la escuela”, explicó.

“Nosotros lo estamos viendo a mi nieto, ahora, con regularidad, porque hubo una denuncia hace poquito. Y cuando pasa eso, durante algunas semanas caminan un poco mejor. Eso genera la expectativa que tal vez ahora sí se encamine. Pero hemos pasado hasta un mes sin verlo y sin saber de él”, narró.

“Y si vas a la casa, te arriesgas a que te hagan una denuncia por violencia doméstica y ahí sí la Justicia responde rápidamente, más allá de si la denuncia es real o falsa, lo que nadie corrobora… Hemos pasado también por falsas denuncia” y te “citan a la Policía, te incriminan bajo apercibimiento… Son medidas que afectan.”, añadió

“A nosotros no nos pasó, pero hay padres a los que, tras estas denuncias, les imponen restricciones de acercamiento por 60 días. Hay padres que no están pudiendo ver a sus hijos sin que exista una causa justificada”, afirmó.

“Hablando de nuestro caso, deseamos que esto mejore” por el bien de todos. “Esperamos que prime la cordura y las buenas intenciones. Y que todas las familias que estamos pasando por esto, podamos disfrutar del goce de nuestros hijos y nietos ahora en las fiestas y que esto quede ya para el resto del año”, señaló.