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La investigación de este caso empezó por la mitad de la cadena de delitos similares. La brigada de Hurtos de la Seccional 10ª de Maldonado trabajaba procurando aclarar un hurto realizado en mayo. El incidente se había confirmado en una vivienda de los Altos de Maldonado. Los ladrones se habían llevado efectos varios, incluyendo la ropa de los moradores de la vivienda.

Este hurto, no solo por cómo se cometió, sino por el volumen de los bienes sustraídos, dejaban indicios suficientes de que el autor había sido más de una persona. Los investigadores comenzaron a esbozar la hipótesis de su trabajo que luego debían convertir en tesis (elaboración con datos empíricos que la confirman) para presentarla al juez en lo Penal a cargo.

Como parte de la construcción de la hipótesis obtuvieron la pista de que los autores vivirían o se habían escondido en el asentamiento Los Eucaliptos. Se obtuvo la orden judicial y se realizó el allanamientos de diversas viviendas en ese barrio precario.

EMPIEZA A ACLARAR LA INVESTIGACIÓN

Al finalizar el procedimiento se había concretado la detención de varias personas. Entre los detenidos se contaban dos hombres, mayores de edad, que tenían antecedentes penales por hechos que los configuraban como eventuales sospechosos del hurto investigado.

Los interrogatorios a los que fueron sometidos los dos hombres confirmaron su responsabilidad de la sustracción de múltiples bienes de la vivienda de Altos de Maldonado, en mayo. Pero también apareció la novedad de que ellos mismos habían concretado hurtos similares en San Rafael, Punta del Este, y la ciudad de Maldonado.

Con la confesión y las pistas obtenidas quedaba conformada la tesis que debía ser sometida a juez. El magistrado en lo Penal de 4º turno recibió el caso este domingo 4 de agosto, y formó posición como para dictar sendos procesamientos de los acusados.

Los dos hombres, J.C.B.G. y C.D.R.A., fueron procesados con prisión. J.B. por haber cometido tres delitos de hurto especialmente agravados por la pluriparticipación y la penetración domiciliaria en reiteración real. C.R. fue tras las rejas por un delito de hurto especialmente agravado por la penetración domiciliaria.

J.B. fue directamente al establecimiento de Las Rosas. C.R., en cambio, entre mayo y este domingo cometió un delito que lo había depositado nuevamente en una celda. El juez determinó que deberá cumplir la prisión preventiva (mientras se completa el procesamiento por este nuevo delito) una vez que haya cumplido con la pena por la que está en la cárcel actualmente.