La vicepresidenta de la Federación Rural, Mercedes Silva, expresó su preocupación por el incremento de robos de animales en distintos departamentos y señaló la necesidad de reforzar los mecanismos de control y prevención.
Silva manifestó su preocupación por el aumento de casos de abigeato en el país. En diálogo con La Contratapa de la Revista de FM GENTE, explicó que la situación viene registrándose desde comienzos de año, con robos importantes en varios departamentos. “Estamos con esa preocupación desde el inicio del año, donde hubo unos robos bastante importantes de ovinos en Canelones y también de vacunos en San José”, indicó Silva. Agregó que uno de los casos más notorios fue el robo de “70 ovinos vivos en Canelones, sin que se lograra encontrar ningún rastro”.
Consultada sobre las causas de la dificultad para localizar a los animales sustraídos, señaló que “seguramente los que hacen los robos son muy hábiles y no dejan rastro”. Además, explicó que “el abigeato común, con animales carneados en la estancia, continúa ocurriendo”, aunque “muchos productores se cansan de hacer denuncias porque finalmente no pasa nada”.
Silva sostuvo que el incremento de estos hechos requiere adoptar nuevas medidas y fortalecer la coordinación entre los actores del medio rural. “Sabemos que las comisiones de seguridad rural no están formadas en todos los departamentos. Esas comisiones son bastante efectivas porque reúnen a productores, fiscales, jefes de policía y jueces una vez al mes para tratar los temas de la zona”, expresó.
En ese sentido, planteó la necesidad de que dichas comisiones se conformen cuanto antes y destacó la incorporación de nuevos recursos tecnológicos para mejorar la vigilancia. “Hay cámaras específicas para colocar de noche que son efectivas para recabar datos rápidamente. También hoy es posible iluminar más las zonas rurales con pantallas solares”, detalló.
Finalmente, Silva consideró que “un buen funcionamiento de las comisiones departamentales de seguridad rural y métodos más efectivos de control, como cámaras nocturnas y más iluminación en cruces de caminos”, podrían contribuir a reducir el problema del abigeato, que definió como “un problema bastante antiguo que en los últimos años venía más tranquilo, pero ahora parecería que aumentó”.