Un tiroteo entre dos hombres en el barrio La Sonrisa, uno iba en moto y el otro estaba en auto estacionado, terminó con el procesamiento con prisión del motociclista, Sergio Poses, de 50 años, y todo fue provocado por un lío de polleras, según consta en la información policial recabada por FM Gente.
El conductor del auto, de 47 años, cuya identidad fue resguardada, estaba estacionado en torno a las siete de la mañana del miércoles 24 de julio en el barrio La Sonrisa por cuestiones particulares.
De pronto apareció otro hombre en una moto del tipo todo terreno, Poses, que al pasar baleó el auto y a su conductor. Este alcanzó a repeler la acción, lo que fue señalado por esta emisora como una señal de que el conductor de automóvil estaba alerta, empuñando su propia arma, o con ella al alcance de la mano, por la rapidez que contestó la agresión.
SE CONFIRMÓ LA TEORÍA INICIAL
La indagatoria policial permitió la reconstrucción del hecho y llegó la confirmación de la teoría elaborada por FM Gente a partir de los datos primarios de que se dispuso:el automovilista contó que cuando estaba estacionado vio aproximarse a Poses a bordo de la moto, es decir, estaba en actitud alerta; no enfrentó una agresión inesperada.
No solo lo vio venir, sino que se dio cuenta que empuñaba un arma de fuego lo que hizo que él hiciera lo mismo con su propia arma, pronto para lo que pasara, y alerta a la actitud de Poses, si no no hubiera podido repeler la acción de alguien que pasa en una moto disparando sin detenerse.
La investigación policial concluyó que Poses efectuó tres disparos al pasar con su moto que impactaron sobre el vidrio lateral de la puerta del acompañante y el parabrisas.
OTRO DATO: AUTO PARADO A CONTRAMANO
La información policial no lo dice, pero si la moto circulaba por la calle y sus disparos pegaron en el vidrio lateral de la posición del acompañante, quiere decir que Poses pasó junto al auto por el lado opuesto al que estaba el conductor.
Si la calle era de doble circulación, el auto estaba estacionado a contramano, porque de lo contrario siempre queda la posición del conductor hacia el centro de la calzada.
Entonces, hay dos posibilidades: obien Poses pasó por la vereda, o lo hizo junto a un auto estacionado a contramano cuando disparó; salvo que la calle fuera de una sola mano y el auto estuviera estacionado sobre la acera izquierda.
SE SALVÓ POR MUY POCO
La declaración del automovilista dijo que había repelido la agresión con un arma de fuego de su propiedad, lo que indica que ya la empuñaba o estaba al alcance de su mano antes de que pasara Poses en la moto.
El conductor del auto fue asistido en un nosocomio privado por una lesión en el ojo derecho provocado por una esquirla de vidrio del parabrisas, lo que indica que se salvó del balazo a su cabeza por pocos centímetros, ya que el trozo de vidrio tuvo que salir despedido en la misma dirección en la que iba la bala.
La declaración de ambos protagonistas del incidente permitió saber que la enemistad y agresividad entre los dos hombres había venido creciendo desde mayo, cuando Poses se enteró que su mujer tenía relaciones íntimas con quién conducía el vehículo.
Este detalle puso en mayor compromiso la posición judicial de Poses porque descarta que hubiese actuado bajo efecto de una fuerte emoción al enterarse de un hecho de esa naturaleza, y confirma que transcurrieron casi ocho semanas en las que habría tenido tiempo de razonar la situación desde una posición más civilizada.
IDENTIFICÓ A SU AGRESOR
El automovilista brindó a los policías que iniciaron la investigación los datos y la identidad de Poses, lo que permitió a los funcionarios detenerle y obtener una autorización judicial para incautar indagar en su domicilio.
En la casa de Poses se incautaron un celular, una caja de municiones calibre .38 con 41 balas lista para ser usadas, una fotografía del automovilista y amante de su mujer, y un revólver calibre .22, empavonado, marca Mahely con siete balas vivas y tres vainas calibre .38 idénticas a las incautadas.
Poses relató a los funcionarios policiales dónde se había deshecho del arma con la que atentó contra el amante de su mujer, inmediatamente después de la agresión.
El juez en lo Penal de 2º turno analizó el resultado de la investigación policial y determinó el procesamiento de Sergio Poses por la comisión de un delito de tentativa de homicidio tipificada en los artículos cinco, 60 y 310 del Código Penal. Ordenó el inmediato traslado de Poses a la cárcel de Las Rosas.