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DURO GOLPE AL SISTEMA K. En las elecciones generales legislativas de este domingo, el gobierno argentino perdió en los cinco principales distritos electorales del país, aunque mantendrá dominio ajustado en el Congreso para los dos últimos años de mandato de Cristina Fernández de Kirchner. La elección abrió un nuevo escenario político tanto en el oficialismo como en la oposición, en el que varios dirigentes buscarán posicionarse de cara a 2015. Sergio Massa en la provincia de Buenos Aires (en la foto), Mauricio Macri y Elisa Carrió en la Ciudad, Hermes Binner en Santa Fe y Julio Cobos en Mendoza dejaron ver sus ambiciones en medio de los festejos. Aunque el revés kirchnerista se extendió a 13 de las 24 provincias, la derrota bonaerense fue, otra vez, la más dura. Massa se afianzó con el 43,92%, escrutados el 96% de los circuitos y aventajó por más de 11 puntos porcentuales al candidato kirchnerista Martín Insaurralde. Con esos números, Massa, intendente de Tigre, logrará un bloque de al menos 16 diputados nacionales y queda en condiciones de discutir con el Frente Amplio Progresista el lugar de la tercera minoría nacional en la Cámara baja. La puerta del Frente Renovador quedó abierta para los que deseen acercarse.El gobierno, en tanto, buscó privilegiar la lectura nacional del resultado en combinación con el componente estrictamente legislativo de los comicios. (El Cronista, citado por El Observador)