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“Esa cosa que está en Punta del Este la vamos a vender porque el presidente no precisa que la casa para su trabajo sea en Punta del Este, y nos vamos a ahorrar los ocho o 10 sueldos que hay. Que vayan a trabajar a un hospital, que es donde se precisan”, indicó Mujica.

La reacciones de la oposición por este tema no se hicieron esperar. El ex vicepresidente y abogado constitucionalista Gonzalo Aguirre dijo a la emisora de Montevideo, El Espectador, que la casa se puede vender pero que la medida no resolverá los verdaderos problemas económicos del país, ya que se trata de un planteo “de menor cuantía”.

“La venta de un inmueble del Estado es un contrato y como tal tiene que estar regulado por las normas legales, que regulan, que rigen la contratación administrativa, que están en la llamada Ley de Contabilidad de Administración Financiera, vulgarmente conocida como el Tocaf. La Constitución no tiene nada que ver con esto”, consideró.

En tanto, en el Partido Colorado, el líder del Proba, José Amorín Batlle, dijo a la misma emisora que la propuesta es buena pero recordó que el presidente Tabaré Vázquez ya había echo planes para la casa de Punta del Este, que nunca concretó.

Dijo que por ahora es sólo un planteo y que para formalizarse debe realizarse un análisis más serio y profundo.