Facebook Twitter WhatsApp

Yanez admitió por FM Gente que elaboró su discurso para defender un trato distintivo para el vino dentro la ley que el gobierno impulsa para regular el consumo de alcohol en el país consultando a expertos y sus propios asesores.

“Tengo que ser justo, una bodeguera muy joven me planteó la preocupación”, dijo sin que nadie se lo preguntara, al explicar por qué adopto la defensa del vino en la ley que regulará el consumo de alcohol.

OTRA CLAVE

Yanez dijo que “yo estoy de acuerdo con el tema de la necesidad de regular el abuso del consumo de alcohol y en los extremos lo más normales y naturales y democráticos posibles”.

“Ahora qué pasa, en mi departamento tenemos casi el 70% de la producción de vino del Uruguay y si bien sabemos que es una bebida que contiene alcohol, que es una bebida alcohólica, a nivel de muchísimos teóricos y científicos está establecido que el vino es un alimento”, explicó, deslizando otra clave de por qué asumió este ejercicio, que en Estados Unidos se llama lobby.

Agregó que “tanto es así que, por ejemplo, a nivel médico, en el tema de lo que son los taninos y demás, se genera hasta un consejo de tener en la dieta del ser humano una copa de vino; obviamente que el abuso y el exceso de la bebida alcohólica, incluido el vino, puede generar consecuencias graves”.

TRATAMIENTO DISTINTO

“Ahora, nosotros no estamos pidiendo específicamente que se saque de la ley el control y la regulación del vino, lo que decimos es que en la propia ley, si se quiere, tenga que tener un tratamiento distinto”, dijo.

Para Yanez, “el Inavi, el Instituto Nacional de Vitivinicultura, que está en Canelones, tiene un laboratorio donde puede demostrar los contenidos que tiene el vino a sus extremos”, lo que según su razonamiento hace al vino elegible para tener un trato particular dentro de la ley.

“No todas las bebidas alcohólicas tienen en Uruguay esos controles de laboratorio, y la ley que establece controles de comercialización, de transporte, de fabricación, al grueso de las bebidas, y a las bebidas blancas particularmente, que vienen del extranjero y no tienen los controles de sanidad que tiene el vino”, consolidó.

Expuso que “no tanto decimos que no esté, porque bueno, si se regulan (los consumos de) las bebidas que son alcohólicas, está bien, vamos arriba; ahora, lo que creemos es que no podemos tomar al vino en la misma categoría que cualquier otra bebida alcohólica”.

“Una botella de vino de tres cuartos (de litro), que vale 150 pesos, los jóvenes o los no jóvenes no lo compran para embriagarse, son bebidas que se consumen en una cena, en un almuerzo, y no son de las bebidas alcohólicas que generan los daños que estamos viendo todos los días”, expuso. Luego agregó que es a este tipo de vinos que se le va a aumentar la carga impositiva por el proyecto oficial.

CONVERSACIONES

Yanez dijo que “nosotros sabemos que hay conversaciones del Inavi con el Poder Ejecutivo, también a nivel del Parlamento se va a presentar la cosa, y existe buena disposición en considerar estos puntos”.

“Entonces, el instrumento, la letra chica cómo se va a redactar falta todavía un tiempito, pero me parece que vamos ganando espacio en demostrar que el vino debería tener un trato distinto”, desnudó.

Acotó que “tampoco estamos pidiendo que no se le controle al vino, lo que decimos es que lo que ya se le controla, que lo que ya tiene como visto bueno, es un visto bueno saludable para la gente, porque nosotros en Uruguay sabemos lo que estamos consumiendo”

“La primera cosa es que se tome conciencia a nivel de opinión pública de lo que estamos planteando; en segundo lugar, el instrumento; yo creo que si la ley ratifica los instrumentos que ya tiene el vino como control, si le da un visto bueno, podría tener un capítulo que repita o enumere lo que ya el vino tiene hoy como control”, sintetizó como sus reivindicaciones.

Concluyó que lo que se debería modificar es recoger en la ley que “el vino o las bebidas alcohólicas que están basadas en tal producto o en tal proceso, mantendrán los controles que existen hoy según la ley tal o se transcriben”.

“En el Uruguay hay algunas bodegas que tienen un nivel industrial (para elaborar vino), pero la gran mayoría son pequeñas bodegas familiares y artesanales; de alguna forma nosotros queremos mantener a esas familias arraigadas al campo, a la pequeña producción, a un vino artesanal que viene de generaciones anteriores”, aseguró.

Objetó que “el desestimulo al consumo de alcohol que es parte de lo que busca el aumento de los impuestos, en el caso del vino pensamos que va a recaer justamente en esa botella de 150 pesos que se toma en la familia”.

Lo que dice la ley

Con esta ley del alcohol el gobierno estima recaudar unos 16 millones de dólares a través de una tasa que se implementará para aplicar a los bebidas y que pagará el consumidor, según versiones publicadas.-


Con respecto a los aspectos más salientes de esta ley se propone la eliminación de la embriaguez como atenuante de un delito; el aumento de los precios de todas las bebidas alcohólicas a través del Impuesto Específico Interno (Imesi); la prohibición de los happy hours o promociones 2 por 1 y también de las actividades con canilla libre. Por otro lado, establece que los delivery no podrán entregar bebidas alcohólicas entre las 22 y las 08 horas, y los negocios no podrán vender alcohol en ese horario.