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La jerarca aseguró que, inicialmente, la empresa trabajó en forma acelerada y estimó que iba a terminar antes del período estipulado en el contrato. Pero las lluvias del verano frenaron el ritmo de obras y, por lo tanto, la entrega.

No obstante, Moreira aseguró que el proceso se encuentra dentro de los plazos programados ya que la entrega a los adjudicatarios estaba prevista para julio de este año y no en octubre pasado, como afirman los vecinos.

“La IDM está verificando detalles de terminación de obra por cada vivienda para luego hacer la recepción provisoria. Antes de recibirlas hay que verificar que todo esté como establece el contrato”, dijo a la emisora. Esto es controlar que, entre otros factores, no haya humedad y que las aberturas e instalaciones sanitaria y eléctrica funcionen bien.

“Como intendencia, queremos minimizar detalles de construcción antes de hacernos cargo y entregarlas a la gente. Vamos a extremar exigencias a la empresa para que entregue todo en las mejores condiciones”, enfatizó la directora.

Por otra parte reconoció que la imagen de las viviendas está siendo utilizada para una propaganda oficial. Sin embargo, afirmó que las soluciones habitacionales son presentadas como parte de lo invertido en el programa de Vivienda porque ya están construidas aunque “la publicidad no dice que la gente esté en ellas o que hayan sido adjudicadas”.

Moreira agregó que los vecinos vinculaban las elecciones del 1º de junio con la posibilidad de recibir las casas antes de esa fecha. Por eso precisó que el acto eleccionario no tiene nada que ver con el proceso de adjudicación y aseguró que todo se hará dentro del período estipulado. Así se lo transmitió a los beneficiarios de las viviendas durante una reunión, en la mañana de este miércoles.