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Esta situación está favorecida por normativas que impiden a funcionarios y autoridades actuar en domicilios particulares.

Quintana informó que se trata de una modalidad que se practica desde años atrás y que se ha difundido en la capital del país. Según el alcalde se trata de “grupos de muchachos y muchachas que vienen de Montevideo básicamente, se juntan y alquilan una casa” con fines que no son los habituales, sino que “instalan boliches encubiertos, donde hay música, se venden bebidas”.
Estos boliches de hecho, no cuentan con autorizaciones ni cumplen con las normas de seguridad, salubridad, inscripciones formales ante organismos y tampoco cumplen con las ordenanzas de zonificación que se le exigen a los negocios instalados.

Por estar instalados en domicilios particulares a las autoridades se les dificulta su fiscalización y el hecho de generarse en horario nocturno la policía tampoco tiene posibilidades de ingresar a las residencias. La única herramienta que cuenta el municipio es aplicar multas por ruidos molestos que se aplican al padrón y no a los organizadores de las fiestas. Luego de reiteradas multas se realiza una denuncia policial por desacato a la autoridad municipal.

Para Quintana este hecho genera una “injusticia” ya que muchas veces el propietario no es participe y no está enterado de la actividad que se registra en su propiedad. Sin embargo el alcalde afirmó que se tratará de combatir la actividad y ejercer los controles dentro del marco legal. Paralelamente indico que están actuando en la prevención realizando una tarea informativa y de concientización entre propietarios y agentes inmobiliarios.

QUINTANA NO APOYA CREACIÓN DE NUEVO MUNICIPIO

Esta noche la Junta Departamental de Maldonado tratará la iniciativa de un grupo de activistas de La Barra de crear un nuevo municipio que contemple la zona ubicada entre el puente ondulante y el balneario Santa Mónica. Todo hace prever que el expediente fracasará al no contar con los votos de la bancada frenteamplista.

Si bien el jerarca carolino responsable del municipio que actualmente comprende la zona en disputa no es partidario de la iniciativa, dijo que “es legitimo el derecho de los ciudadanos de querer un municipio en la zona balnearia”. No descarto que en el futuro si ese sector del territorio sigo creciendo en materia de residentes permanentes, se puede generar la creación de un municipio o alguna otra alternativa de gestión más específica para la zona.

Quintana también invocó motivos presupuestarios para justificar la negativa. “No somos partidarios de seguir reproduciendo debilidades y carencias” y agregó “de que sirve crear un municipio si después no va a tener los suficientes recursos humanos, ni las maquinas, ni los camiones, ni presupuesto”.