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Es en serio

La OSE, tanto como la UGD carecen de recursos para atender la emergencia, que es bastante más grave de lo que se cree, advirtió el edil nacionalista Miguel Muto, quien llamó la atención, entre otras cosas, sobre la contaminación del arroyo Maldonado, que arroja sus aguas sobre las playas de La Barra y dio a entender que la única solución a la vista sería la tercerización de las inversiones.

Muto recordó que esta problemática “se arrastra desde hace 20 años, desde la propia creación a la UGD” y afirmó que solucionarla “reviste extrema importancia para el presente y futuro del departamento”, porque está en juego el turismo.

“El bienestar de los vecinos del departamento de Maldonado continúa afectado por la tarifa de agua más cara del país, pero fundamentalmente por el riesgo que conlleva la falta de obras de saneamiento y la pérdida de suministro y calidad del agua vinculada directamente al estado de una infraestructura obsoleta y lista para colapsar en materia de tuberías”, señaló.

El presente

El edil indicó que “tenemos 400 mil metros cuadrados anuales autorizados para construir”, pero no hay “una inversión seria proyectada en esta materia”.

A excepción del colector impulsado por el contador Ricardo Alcorta que fue para una zona costera específica y limitada, de la avenida Francia al norte no hay saneamiento y bueno desde San Rafael y Rincón del Indio hacia el este, barrios tradicionales como Cantegril y zonas enteras (siguen) sin este servicio vital.

Según dijo, también es urgente el relamo de la ciudad de San Carlos “cuyas aguas servidas se siguen volcando diariamente al arroyo Maldonado hasta que como ustedes saben, se declare oficialmente contaminado su curso”.

Asimismo, indicó que “para poder habilitar tres o cuatro grandes construcciones como la Fendi y otras aledañas” la UGD zanjó la situación usando “el pozo de bombeo de la parada 10”, indicó.

“Nos preguntamos hasta cuándo va a soportar un sistema, que ya evidenció en la temporada, la falta de suministro de agua en distintos puntos de Maldonado, San Carlos y Piriápolis.

En una temporada que no tuvo la gran afluencia de turismo de otras y que dejó gente sin poder ducharse en Piriápolis o sin agua en el barrio de La Cuchilla en San Carlos y sin presión en decenas de puntos”, aclaró.

El futuro

“No estamos hablando solamente de la pérdida de agua de la única fuente, ahora, para todo el departamento que es la Laguna del Sauce. No estamos hablando solo de perder su calidad.... ni siquiera nos referimos a la falta de presión necesaria e inexistente en las tuberías, que buenos dolores de cabeza e impotencia dan a los bomberos o pérdidas millonarias al afectado por un incendio como sucedió en plena temporada”, señaló el edil.

“No hablamos de las pérdidas millonarias que significaría en materia turística quedarnos sin agua potable durante una temporada. Estamos hablando de los próximos 20, 30 a o 40 años para obtener, distribuir y mantener el recurso vital y lo que conlleva”, agregó.

Muto indicó que la UGD Maldonado “recauda 50 millones de dólares anuales y 23 de ellos son ganancia neta o superávit”, por lo que “podríamos hacer obras que solucionen este grave problema”. Sin embargo, la empresa local “tiene que pedir autorización a OSE por cada dispensador de agua que necesite su oficina. A ese extremo llega la falta de autonomía administración; ¿de qué gestión desconcentrada se habla?”, preguntó.

“Si tiene que pedir permiso para gastar en un dispensador, imagínense lo que será para cambiar una tubería podrida. Y hablando de podrida quiero exhibir solo esta fotografía en la que podrán apreciar como es una cañería podrida por la que está circulando el agua que consumimos”, agregó.

Según dijo, actualmente “Maldonado tiene 40 kilómetros de cañería en este estado.

Cuenten desde donde estamos sentados 40 kilómetros en la dirección que les guste.

Esta cañería está en situación límite. Hay miles y miles de metros más que necesitan limpieza y mantenimiento”.