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Velázquez relató en FM Gente que su hija fue atacada por un compañero el martes pasado, mientras ambos se encontraban en una casita de juegos ubicada en el patio destinado a los alumnos de Educación Inicial.

Según testimonio de la maestra, ningún adulto supo lo que ocurría hasta que otro niño de la clase les avisó.

Velázquez radicó la denuncia policial este martes y la niña fue estudiada por el forense, quien constató “múltiples arañazos, mordidas y golpes en la frente, con algo más contundente, lo que hace suponer que pudieron ser los championes y que le dieron patadas mientras estaba en el piso”.

Velázquez no ocultó su molestia e indignación porque, cuando la llamaron para pedirle que fuera al colegio tras el incidente, le informaron que la niña había sido mordida por un compañero. “Cuando llego me encuentro que tenía toda la cara desfigurada, toda hinchada, le estaban poniendo hielo y habían llamado a la emergencia. Era mucho más que una mordida”, enfatizó.

La pequeña identificó al agresor, pero la mamá no quiere hostigarla ni exigirle que dé más detalles. Como ninguna maestra vio lo que ocurrió, Velázquez espera que el caso se investigue. “Quiero que me respondan qué fue lo que pasó”, dijo, para adelantar que en los próximos días la niña será evaluada por un psicólogo.

La mujer responsabiliza a las tres maestras que estaban a esa hora en el recreo y a la directora de la institución. “Trato de tomarlo con la mayor mesura dentro de lo posible pero voy a iniciar todas las acciones que corresponden. No sé si el niño (agresor) vive en un ambiente violento, pero responsabilizo a esos tres adultos porque en ellos deposito mi confianza durante las horas que les entrego a mi hija”, manifestó.

El caso, en tanto, ingresaría el lunes próximo al juzgado de décimo turno.

(foto de archivo: Bebés 2.0)