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Amaro, que representa al Partido Colorado en el directorio de Ancap, contó que “la semana pasada pedí una puesta a punto de la situación de las cuentas de Ancap con el dólar y el petróleo en los niveles en que están”.

“En la misma oportunidad dije que no tenía dudas que rápidamente vamos a tener dificultad: la dificultad se probó, hay un desfasaje grande entre los valores de la paramétrica y la actualidad y eso genera que cada embarque de petróleo da pérdidas a Ancap”, explicó.

COMPETITIVIDAD Y RENUNCIAMIENTO FISCAL
Amaro prosiguió contando que “nosotros ayer no acompañamos el aumento por un fundamento muy claro: hay un problema de competitividad en los precios con Argentina; ahí se bajó el Imesi (impuesto específico interno) para que los valores de los combustibles en Uruguay quedaran equilibrados a los de Argentina en las naftas, que es lo que se opera con Imesi”.

“Yo pretendía que se diera un trato al tema impositivo con un renunciamiento fiscal para amortiguar la suba que (del precio) que tenía que existir en el día de ayer”, amplió.

Dijo que “estábamos dispuestos a acompañar una suba modesta con un sacrificio fiscal para que se pudiera atenuar el aumento”.

“El Poder Ejecutivo, a través de Economía, dijo que no era posible el sacrificio fiscal y que todo tenía que ser trasladado a precios”, completó Amaro explicando la forma de fondo cómo actuó el gobierno.

El director razonó que “me parece que un aumento de 9,7% es terriblemente complicado para la economía, para la producción, para lo que va a ser el tema inflacionario, y para todo lo que puede generar en materia económica eso que tienen los combustibles.

APOYO Y MAZAZO
Amaro deslizó que su planteo no era descabellado, por lo menos, para sus compañeros de conducción de Ancap. “Tanto es así que los compañeros de directorio compartían el criterio”, dijo.

Explicó que “el tema impositivo es del ministerio de Economía, nosotros no tenemos ninguna posibilidad de incidir en los valores del Imesi”.

El gobierno desembocó en un año de achicamiento del ritmo de expansión que trajo la economía en la última década de forma continuada, con un déficit fiscal que superó el 3% del producto interno bruto.

Los ingresos del gobierno no alcanzan a financiar lo que gasta, y es por ello que el país debe recurrir a tomar financiamiento externo, porque el Poder Ejecutivo se niega a controlar el gasto, de la misma forma que se negó a realizar un ahorro para enfrentar estas circunstancias mientras la economía venía creciendo.

“Y para que la gente sepa, el Imesi es aproximadamente un 45% del precio de las naftas, casi la mitad;es muchísimo dinero que con un sector productivo que si bien recuperó un poco de competitividad tiene dificultades por los costos del país, bueno, esto es un mazazo muy duro”, opinó.

ANCAP PRECISABA EL AJUSTE DE PRECIOS
Amaro afirmó que “si algo me gusta es ser absolutamente sincero: yo no puedo salir hoy a decir que Ancap no precisa esto que ocurre, pero Ancap dentro de la economía juega un papel fundamental”.

“Los combustibles tienen que ver con el movimiento de un país, y me parece que un golpe de un 9,7% en los precios es una muy mala noticia para el Uruguay y una pérdida de competitividad muy importante” en este momento, reflexionó.

Ubicó los parámetros para disponer este aumento: “Los números del gobierno dan 22 (pesos por) el dólar, y el petróleo ya con esta noticia de que el tema bélico podía quedar sin efecto, que sería muy bueno para la paz del mundo, eso abre una expectativa inmediata, bajó dos dólares el barril en el día de ayer”, miércoles 11 de septiembre.

“O sea que (el petróleo) puede adecuarse en torno a los 100 dólares el barril en las próximas semanas, y en 60 días se estará reconsiderando” otra vez la tarifa de Ancap, recordó.

Amaro negó “la posibilidad de que los precios establecidos en la paramétrica se puedan sostener; a mí me parece una posibilidad incorrecta porque bastante duro ya es el aumento que se está aplicando”.