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Puntualmente, Pintos mencionó la “falta de respuesta” de la Dirección de Asuntos Legales y acusó a sus jerarcas de no atender expedientes enviados por el municipio. Por ese motivo, la alcaldía pidió al secretario general de la Intendencia, Gustavo Salaberry, que intervenga personalmente para destrabar la situación.

Otras dificultades, según el concejal, se registran a nivel de la Dirección General de Higiene, donde “hay algunos cambios” sobre temas previamente acordados en conjunto con el municipio de Punta del Este.

DISCORDANCIAS EN HIGIENE

A modo de ejemplo, señaló que desde esa repartición de la Intendencia resolvieron adjudicar nuevas autorizaciones para vendedores ambulantes en la zona de la Glorieta del balneario, vulnerando un acuerdo con el municipio en cuanto a no otorgar más permisos y derivar los actuales vendedores a la feria artesanal de la Plaza Artigas.

“Entendimos que no se respetó el acuerdo y lo elevamos al intendente para que sea quien tome las medidas necesarias para que no se expidan más autorizaciones de vendedores ambulantes en esa zona”, indicó Pintos, quien recordó que la potestad en materia de Higiene aún permanece en la órbita de la Intendencia.

Aunque esa responsabilidad no fue asumida todavía por la alcaldía, los concejales esperaban que se adoptaran paulatinamente sus criterios en las resoluciones vinculadas a su jurisdicción.

CARENCIAS EN TRÁNSITO

La solicitud de más elementos para reforzar la actividad de los inspectores de Tránsito es otro de los planteos municipales que fracasó. Pintos recordó que en 2010 la intendencia accedió a pasar 13 inspectores a la órbita de la alcaldía, pero subrayó que estos no cuentan con los elementos necesarios para trabajar adecuadamente.

En la jurisdicción es “urgente” contar con decibelímetros y espirómetros, entre otros aparatos, por lo cual estos aparatos fueron solicitados a la dirección de Movilidad Ciudadana. Sostuvo Pintos que desde esa repartición les respondieron en forma negativa, ya que no hay aparatos suficientes para enviar a Punta del Este.

Si bien el concejal admitió que en el presupuesto a estudio de la Junta Departamental se contemplaron partidas para la compra de estos aparatos, entiende que el balneario y su jurisdicción no pueden esperar. “Entendemos que es algo urgente para que los inspectores trabajen mejor. Las espirometrías de verano fueron coordinadas con al Policía de Tránsito y generalmente se utilizan aparatos prestados”, subrayó.

La aspiración de la alcaldía, cuyo titular es el nacionalista Martín Laventure, es contar para este invierno con otra camioneta para las tareas de los inspectores y también para un relevamiento proyectado en materia vial.

Pintos explicó que algunos árboles y refugios para usuarios de ómnibus en Roosevelt dificultan la visión de los conductores, por lo cual en los planes más próximos del municipio figura un relevamiento de los puntos más complejos a fin de solucionar la situación.

UNA MANO PARA LA TERMINAL

Mejorar el estado de la terminal de Punta del Este es otro de los objetivos de la alcaldía, cuyo temor es que la actual estructura quede desatendida en función el proyecto de construir una nueva terminal que unifique Punta del Este y Maldonado en la zona de la cancha de Defensor.

Aunque entiende que el proyecto beneficiará a la zona, Pintos advirtió que no se puede desatender la terminal que ahora está en funcionamiento. En ese sentido, reclamó mejorar la iluminación, tomar medidas en cuanto a la licitación de los servicios de limpieza y acondicionar la infraestructura edilicia mientras no se apruebe, ejecute y habilite la proyectada nueva terminal.