Facebook Twitter WhatsApp

Fuentes, que reemplaza a Gabriel Freitas en el cargo, se excusó varias veces durante la entrevista por no poder decir mucho lo que va a hacer porque “recién hace cuatro días que estoy” en la dirección del área, pero luego fue contando aspectos de la actividad que desarrolló en este tiempo.

Ya mantuvo reuniones con técnicos de El Jagüel, postergó para la semana que viene una reunión amplia con el personal que está a su cargo a la espera de una funcionaria que está culminando una etapa fundamental de su formación, y programó para el lunes 22 de julio una visita a los lugares en los que el Centro Beraca Maldonado desarrolla su actividad.

SEGUIR EL LINEAMIENTO NACIONAL
Fuentes reiteró también durante la entrevista que su gestión tendrá “los lineamientos de la Junta Nacional de Drogas, por supuesto”, afirmación que cobra otro contenido si se tiene en cuenta que su antecesor, Freitas, mantenía una fuerte discrepancia con la aprobación de la ley que legaliza el consumo y distribución de la marihuana en Uruguay.

Quedó en claro que ya tuvo tiempo de darse cuenta que los tiempos del Estado no son los mismos de la sociedad civil: “Los tiempos nuestros de afuera no son los mismos tiempos del Estado”, dijo.

INVOLUCRAR A LA SOCIEDAD CIVIL

Fuentes sostuvo que tratará “de involucrar a la parte civil de la sociedad para no depender solamente del Estado, porque el problema adictivo es de toda la sociedad, no es solamente de un sector, entonces vamos a tratar de trabajar en forma conjunta”.

“Yo ya lo he estado conversando de forma muy informal con empresas privadas para tratar de conseguir aportes para el área, para los muchachos (adictos), ver qué falta, qué no falta; todo lleva un tiempo y yo hace cuatro días que estoy”, repitió otra vez.

También mencionó su intención de aprender su nueva función: “Y bueno, me tengo que tomar un tiempo porque yo no conozco mucho, en realidad no conozco nada; trabajaba para una empresa privada”.

“Voy a trabajar en conjunto con los técnicos de la intendencia, vamos a trabajar de forma conjunta los técnicos, los administrativos, y la parte política, y a tratar de hacer lo mejor siempre abiertos hacia la sociedad llevando una política nacional que es muy fuerte en este tema”, esbozó.

Cuando se le consultó sobre si traía lineamientos políticos para el desarrollo de su trabajo, respondió con mucha simplicidad que “ya hay un trabajo proyectado, coordinado con talleres en liceos y escuelas, y como que ya estamos a mitad de año” no es conveniente cambiar mucho, opinó.

“Vamos a ir siguiendo la misma línea que se estaba haciendo muy bien, seguir apoyando esto, y después a empezar a trabajar sobre lo que se va a hacer para el verano”, deslizó, un tiempo particularmente árido para su área, por la irrupción de un mercado de consumidores de drogas nunca mensurado hasta el momento.

Dijo que “los técnicos ya tienen una línea marcada de trabajo, no voy a entrar yo a cambiarles todo en dos días, vamos a seguir en esa coordinación con las escuelas sobre la prevención de drogas que se está haciendo y en las policlínicas; de repente para el año que viene se le da otra impronta” más personal a la gestión.

zl