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Consultado sobre la proyectada reforma de la llamada “caja militar”, que está desfinanciada, Fígoli aclaró que esta institución “no administra recursos propios, está en relación de dependencia administrativa y financiera del Ministerio de Defensa Nacional y no genera sus propios recursos. De maneja que no es ‘caja’. Simplemente recibe los fondos y realiza el pago de haberes a retirados, pensionistas y equiparados”. Por tanto, precisó que en realidad “es un Servicio de Retiros y Pensiones de las Fuerzas Armadas”.

Agregó que “estos trascendidos de propuestas de reformulación del servicio de retiros ha generado cierta preocupación en la familia militar”.

Dijo que el foco de la preocupación es la eventual creación de “un nuevo tributo, de un valor aproximado al IASS, que ya estamos aportando al BPS”.

Explicó que, si se concreta, “vamos a recibir doblo imposición, doble tributo, ante un mismo hecho generador, que es la situación de retiro o se pasividad de los militares”.

Fígoli señaló, asimismo, que una eventual reformulación “va a tener impacto no solo en los que ya estamos retirados, sino también para los que están en actividad”, lo que implicaría el cambio de las leyes que regulan esta materia.

Fígoli informó que en las últimas horas se cumplió una asamblea en Montevideo, en el Club de la Fuerza Aérea, en la que intervinieron unas 1.200 personas, y dijo que hoy viaja a Maldonado para informar a los militares de la zona sobre lo que se está trabajando. Destacó que la idea es que el plan de acción no se restrinja solo a Montevideo, sino que también llegue al interior del país.