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Madeiro dijo que la Intendencia estudia un ajuste de la tarifa en los primeros días de octubre, teniendo en cuenta el aumento en el índice de precios al consumo, la fluctuación del dólar y la merma en la venta de boletos, entre otros factores. “Estamos tratando de que sea lo menos posible e incida de forma poco significativa en el bolsillo de la gente”, señaló.

De hecho, explicó que un aumento excesivo en las tarifas podría provocar un efecto nocivo para las empresas porque los usuarios dejan el transporte colectivo y se compran una moto. Paralelamente, la Intendencia procura que a fines de esta administración de gobierno haya 25 nuevos ómnibus circulando en el departamento.

HAY CONTROLES

En otro orden, Madeiro aseguró que se han incrementado los controles de tránsito y destacó que se ha reforzado el personal. Sin embargo, entiende que es posible que la población no lo note porque los mismos inspectores municipales cumplen diversas funciones en la división.

El director afirmó que la tarea de fiscalización se realiza “de acuerdo a las posibilidades” existentes y remarcó que “casi el 100% de los inspectores” está, a diario, afectado al control de tránsito en las escuelas y al área de libretas de conducir, ofrecen charlas en diferentes centros y paralelamente fiscalizan el cumplimiento de las normas de tránsito.

“No siempre se ve todo este trabajo y es cierto que se nos escapan lugares por el gran crecimiento del departamento y los recursos finitos de nuestra división. Aunque cada cierto tiempo incorporamos personal y hemos reforzado los controles”, afirmó Madeiro.

En ese sentido, anunció que evaluarán ofrecer informes periódicos a la población sobre los lugares y fechas en que se realizan los operativos y sus resultados “para que la población note cuál es la tarea que realizan los inspectores”.