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Policías de la brigada de Hurtos de la Seccional 1ª de policía realizaba el pasado martes 17 de febrero unas recorridas por Maldonado en horas de la madrugada.

En determinado momento creyeron ver a un hombre que se metía en el predio de un edificio de la zona. La actitud del hombre, más que cuidadosa, era la de alguien que temía ser visto.

Fueron detrás de él para saber en qué andaba. Cuando los policías se asomaron al predio alcanzaron a ver al hombre que se había tirado al piso y se arrastraba procurando quedar oculto detrás de un cerco de plantas. Fue detenido en el acto.

En el primer intercambio con los policías, el detenido contó su historia. Dijo que había llegado a Maldonado en busca de trabajo, y que estaba tratando de mantenerse hasta encontrarlo.

El registro de las ropas del detenido dieron señales claras de que no era alguien que estaba en una situación precaria buscando trabajo: llevaba consigo 300 dólares, 800 pesos uruguayos, 500 francos, y un paquete de bijouterie diversa.

Se le identificó como Andres Fabían Niz, de 45 años de edad, con antecedentes penales en otro departamento que no es Maldonado. Se marchó con él a la comisaría para continuar indagándole.

Mientras un grupo de policías seguían el procedimiento habitual para el caso, otros seguían patrullando la ciudad. Un equipo policial que pasó cerca de donde el hombre había sido detenido descubrió que en el interior de un auto Chevrolet Corsa dormía una mujer.

Los policías entendieron pertinente averiguar qué le pasaba, por qué dormía en un vehículo. Así que despertaron a la mujer y se lo preguntaron. La mujer dijo que es oriunda de Montevideo, que esperaba a alguien y se quedó dormida.

Inspeccionado el auto apareció en la guantera la licencia del conductor. El nombre del hombre era Andrés Niz, el mismo que estaba detenido en la Seccional 1ª de policía en ese mismo momento respondiendo por lo que hacía durante su detención.

Los policías fueron más a fondo en la revisación del auto: encontraron cuatro teléfonos celulares de diferentes marcas y modelos, un morral, una gorra, un reloj. 9.160 pesos uruguayos, 371 dólares, y 85 euros. Se llamó a Policía Científica para concurriera al lugar a documentar todo. La mujer y el auto fueron conducidos hasta la comisaría.

Transcurridas las horas comenzaron a llegar personas a denunciar robos en sus casas, en la zona donde el hombre había sido detenido. Todos reconocieron algo de lo que había sido incautado al hombre y en el auto. En las denuncias quedaron constancias de domicilios violados, de grandes desórdenes en el interior para robar.

Con toda esta evidencia el caso fue notificado a Penal 4º turno. La juez a cargo no se mostró conforme y pidió a los policías que se hicieran las coordinaciones necesarias para allanar el domicilio de los detenidos, en Montevideo.

Practicado el procedimiento, en presencia de la mujer, se incautaron alhajas varias, 23 relojes, una lupa, teléfonos celulares, 2.500 pesos uruguayos, 32 pesos argentinos, dos reales, y 20 pesos mexicanos.

La juez consideró que el procedimiento había sido completado. En las últimas horas se pronunció dictando el procesamiento de Andrés Niz como autor de tres delitos de hurto especialmente agravados por la penetración domiciliaria, y un delito de violación de domicilio especialmente agravado en régimen de reiteración real.

El acusado fue enviado de inmediato a cumplir con la prisión preventiva, la que se extenderá, al menos, hasta que la actual instancia del proceso sea completada. La información oficial no dice nada específico pero da a entender que la mujer quedó desvinculada de los delitos.