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Una mujer se presentó el jueves 15 de enero en la sede de la Secciional 1ª de policía para radicar una denuncia.

Estableció que dos hombres que circulaban en una moto negra del tipo Px se le aproximaron y le arrebataron una mochila que llevaba.

Detalló que en el interior de la mochila se llevaron un teléfono celular Samsung Duo con estuche y un par de lentes de receta.

Los investigadores, con la colaboración de la prestadora del servicio del teléfono robado, pudo ubicar el aparato en una vivienda de Pan de Azúcar.

Obtuvieron la autorización judicial para un allanamiento, lo realizaron, consiguieron incautar el teléfono que buscaban.

La mujer que lo estaba usando dijo que lo había comprado a una compañera de trabajo que se lo vendió en 4.000 pesos uruguayos. Proporcionó nombre y apellido de la compañera de trabajo.

La mujer que le vendió el teléfono robado a su compañera fue ubicada y llevada detenida.

Se convocó a la denunciante de la rapiña para que reconociera el teléfono. Lo reconoció plenamente como suyo.

Se informó los detalles del caso hasta ese momento a Penal 4º turno. La juez a cargo decidió porcesar a D.S.H. (iniciales de nombre y apellidos), de 49 años de edad, carente de antecedentes penales, la mujer que estaba usando el teléfono robado, como autora de un delito de encubrimiento.

En lugar de enviar a la acusada cumplir con la preventiva, la magistrado ordenó que durante los próximos 60 días deberá presentarse tres noches a la semana a la seccional policial de su domicilio y pasar la noche detenida en esa dependencia cada vez.

La juez ordenó que la otra detenida, que le vendió el teléfono a D.S.H., quedara detenida a disposición del juzgado.