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El nuevo reglamento de los cuidacoches de Maldonado está a estudio de la Junta Departamental y, por estos días, es objeto de análisis por parte de los trabajadores. Según Barros, en líneas generales es positivo para el desarrollo de las tareas, porque soluciona algunos “vacíos legales” y atiende situaciones que no están contempladas en el reglamento vigente.

A modo de ejemplo, dice que en la actualidad hay 70 cuidacoches autorizados por la intendencia y otros 100 que operan sin permiso. “El vacío legal impide actuar contra los que no están habilitados”, señala Barro, quien destaca que el nuevo reglamento establece claramente que “ninguna persona puede prestar el servicio sin autorización.

El proyecto también los protege en el ejercicio de su función. “Los cuidacoches tienen mala fama, de que se alcoholizan y drogan. Si alguno es denunciado por un conductor y está registrado, se expone a que lo sancionen o le retiren el permiso definitivamente. Pero si se trata de un trabajador no autorizado, no existen posibilidades de tomar medidas porque hay un vacío legal”, explica.

Hay discrepancias, sin embargo, respecto a la obligatoriedad de ser monotributistas: “algunos cuidacoches dicen que no ganan lo suficiente para pagarlo. Otros entienden que el monotributo los beneficiará, por ejemplo, para su jubilación”.

Otra de las disposiciones previstas es la instalación de “un tribunal de alzada” que analice y se expida en caso de denuncias. Estará integrado por un representante del municipio donde se produzca la falta, uno de los cuidacoches y otro de los inspectores municipales, y su fallo será irrevocable.

Aunque están de acuerdo con el sistema, los cuidacoches entienden que deberían tener derecho a apelar la decisión y en ese sentido trabajarán los próximos días con la esperanza de que se modifique esta disposición.

En otro orden, Barro recordó que estos trabajadores están para evitar que los autos sean dañados o robados. Pero no tienen autoridad para intervenir, más que tomando matrículas en caso de incidentes o avisando a la Policía si detectan algún acto delictivo.

“El único que puede hacer una denuncia es el propietario del coche. Tampoco tenemos potestades para interrumpir o dirigir el tránsito, aunque a veces ayudamos para ganarnos la propina”, aclara.
En los próximos días el gremio se entrevistará con los alcaldes, para intercambiar opiniones sobre el proyecto de reglamento. También prevén hacer reuniones informativas, aunque con pocas esperanzas de captar a todos los interesados.

“Vamos a hacerlo ahora, pero en verano aparecen 500 cuidacoches permisarios que después se van a trabajar a otra parte y no tienen mucho interés en este tema. Tal vez saber que van a tener que pagar monotributo llame su atención”, comentó el vocero, quien aclaró que ya no pertenece al gremio de cuidacoches pero los está asesorando en base a su experiencia de muchos años en esta función y a su participación en negociaciones con jerarcas de la Intendencia y de la Junta Departamental mientras estuvo en el gremio.

(foto: gruporadar.com.uy)