El ex presidente del Banco Central, César Rodríguez Batlle, comentó en FM Gente la necesidad de tomar previsiones como país para estar preparados por el agravamiento de las condiciones económico financieras tanto en Argentina como en Brasil. Rodríguez Batlle puso énfasis en la necesidad de respetar los ciclos de la economía.
“Desde el punto de vista macroeconómico tenemos que estar alertas; alertas a lo que ocurra en el Brasil, y alertas a lo que ocurra en la Argentina, porque en cualquiera de los dos países, si entraran en problemas que no lo deseo ni lo anuncio, pero deberíamos estar precavidos ante una situación de esa naturaleza”, dijo.
Rodríguez Batlle integró el equipo económico del gobierno del presidente Jorge Batlle (2000-2004), del que es primo, y debió enfrentar la peor crisis económico financiera del país en más de dos centenas.
LOS CICLOS ECONÓMICOS
Rodríguez Batlle afirmó que “el país ha aplicado algunas políticas turísticas en materia impositiva, pero de todas maneras siempre hay mucho más para hacer, y creo que el ministerio de Turismo tiene claro que necesita seguir avanzando en políticas que consideren especialmente los ciclos económicos”.
“Hoy que se avizoran tiempos de dificultades: es bueno que se definan políticas turísticas que permitan una continuidad de la gestión”, dijo.
La advertencia de Rodríguez Batlle cobra especial significado porque miembros del equipo económico conducido por el actual vicepresidente Danilo Astori durante los dos últimos gobiernos, desestimaron en declaraciones públicas la vigencia de los ciclos de la economía, y afirmaron que las condiciones locales, regionales y mundiales habían llegado para quedarse
Rodríguez Batlle analizó que “el Brasil tiene problemas, la Argentina tiene problemas, Uruguay en ese sentido está mejor y es necesario aprovechar esas circunstancias, no porque queramos aprovechar que haya problemas en otros países”, dijo.
“Sin embargo, la competitividad en los últimos tiempos nos ha ubicado en un lugar mejor para competir con esos mercados, y por eso hemos recibido siempre una visita muy abundante de argentinos y de brasileros”, interpretó.
Expuso que “este año los datos no los tengo porque todavía oficialmente no se han dado, probablemente ha habido una merma, pero de todas maneras sigue siendo un lugar interesante para los turistas de la región”.
TODOS CONTRAS LOS FONDOS BUITRES
Rodríguez Batlle convalidó una pregunta que le cuestionaba si los fondos buitres que especulan con títulos de Argentina y mantienen con las autoridades de este país una disputa por intereses mayúsculos, pueden afectar a Uruguay.
“En cierta medida algo ya ha afectado, porque algún turismo se ha perdido, porque han tenido más que nada, más que por los fondos buitres, han tenido restricciones en materia monetaria y cambiaria que les hace difícil a un sector argentino, fundamentalmente de clase media, venir al Uruguay”, respondió.
Agregó que “eso ya nos ha impactado; de todas maneras la incertidumbre de la Argentina es un elemento que sin duda no es favorable para el Uruguay porque si hay incertidumbre en la Argentina el viajero o el turista se restringe, se limita, y no está dispuesto a venir a gastar al Uruguay mientras no tenga una cierta tranquilidad interna”.
“Por eso digo, este 2015 es un año electoral en Argentina que hay que seguir con atención; yo pienso que en esta temporada, por lo que he hablado con los operadores turísticos, si bien hubo una retracción, y hubo alguna caída de precios, todavía para algunos les ha resultado más favorable de lo esperado”.
PRESIÓN FISCAL Y TARIFAS
Rodríguez Batlle fue consultado sobre una afirmación de los operadores turísticos de Maldonado que sostienen que con la presión fiscal que aplicaron los últimos dos “gobiernos de izquierda”, ellos no pueden sostener una misma tarifa de un año a otro.
“Eso es verdad, se están equivocando esos gobiernos que se llaman de izquierda y no lo son realmente, porque no gravan al que tiene más, sino al que está en una planilla y gana más, y hace horas extras”, contestó.
Explicó que esos gobiernos “le gravan con el IRPF (impuesto a la renta de la persona física), pero no gravan a los grandes empresarios capitalistas, sino que gravan a alguna clase media”.
“Eso afecta sin duda la tranquilidad y el desarrollo del turismo en el Uruguay”, concluyó.
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